Raquel Meroño se ha convertido en una de las celebrities del momento. La actriz y presentadora, que se había mantenido alejada de la televisión durante unos años, ha vuelto pisando fuerte. Y no lo ha hecho sola. Raquel cuenta con el fundamental apoyo de sus dos hijas mellizas, Daniela y Martina, fruto de su relación con el empresario Santi Carbones. La pareja se separó en el año 2018, pero, aún así, mantienen una estupenda relación por el bien de sus dos hijas, de 14 años.

Lo cierto es que, junto a ellas, Raquel comparte una infinidad de recetas y bailes a través de sus redes sociales, donde acumula ya más de 200 mil seguidores. Así, la actriz se ha convertido en una experta en las cocinas y, también, en subir vídeos a TikTok, donde siempre le acompañan Daniela y Martina. También es con ellas con quien celebra sus victorias y sus veranos de sol y playa en Tarifa, donde tiene un chiringuito junto a su expareja, Carbones13.

Raquel Meroño nació en Madrid hace 46 años y pronto supo que su carrera estaba en el mundo del espectáculo. Realizó sus primeros pinitos como modelo a los 16 años, y más tarde llegaron también trabajos esporádicos en publicidad o en televisión, que compaginó más adelante con sus estudios en Periodismo. Sus primeros pasos en la pequeña pantalla fueron como azafata en un concurso de televisión y, más adelante, presentó varios programas. Luego, participó en una de las series juveniles más famosas, Al salir de clase, donde dio vida a Paloma.

En el año 2003 decidió darle un pequeño descanso a su carrera y se alejó de la pequeña pantalla para darle más importancia a su faceta como empresaria. Tres años más tarde, dio a luz a sus dos hijas mellizas, Martina y Daniela. A partir de ese momento, volver a la televisión se hizo, cada vez, más complicado.

Raquel decidió tomarse un tiempo de descanso y creó, junto a que por entonces era su marido, Santi Carbones, Rock and Loft, una empresa dedicada a las localizaciones de espacios y organización de eventos. Este se convirtió en un negocio muy rentable y que decidieron ir ampliando con el paso del tiempo. Además, debido a su éxito, ambos también quisieron probar suerte en la hostelería y en el 2016 abrieron Carbones13, un chiringuito a pie de la playa de Los Lances en Tarifa. La madrileña tiene un cariño especial a esta zona gaditana, a la que considera como su paraíso.

Raquel y su marido se casaron en una exótica e íntima ceremonia en Bali en el año 2011, pero tras unos años juntos, decidieron tomar caminos por separados en el 2018. Aún así, la relación entre ellos es magnífica y han sabido buscar esos puntos en común por el bien de sus dos pequeñas. Según apuntaron en su momento decidieron separarse por un desgaste “fruto de los roces de la convivencia, tanto en el trabajo como en casa”. Eso sí, pocos meses después de tomar esa decisión, Raquel confesó que ambos estaban llevando la separación “de maravilla”. “Compartiendo casa, familia y trabajo. Cuando hay buen rollo no cabe otra opción”, comentó en una revista.

Durante todos estos años, sus dos hijas se han convertido en su mayor apoyo y han estado junto a ella en todos esos momentos de éxito que ha vivido en los últimos meses. Así lo muestra Raquel en sus redes sociales, donde se refiera a ellas como #LasMeroño y con quien ha pasado estos meses de confinamiento.

Parece ser que ese tiempo les ha servido para unirse más y han grabado infinidad de vídeos, con bailes, cambios de vestuario y con coreografías más que estudiadas. De esta manera se puede comprobar la perfecta sintonía que hay entre las tres y es que, además, las mellizas también se han convertido en las mejores chefs para su madre.

Raquel ha compartido, a través de su perfil de Instagram, cómo han crecido sus dos hijas. “Creciendo deprisa”, comentó la actriz en una de las instantáneas donde posa con Daniela y Martina. Lo cierto es que sus seguidores han resaltado el parecido físico de las dos adolescentes con Raquel. “Qué grandes, cada vez se parecen más a ti”, le comentaba una seguidora.