Las redes sociales han llegado a nuestras vidas pisando muy fuerte. De estas ha surgido una nueva profesión: los influencers. Se trata de un trabajo que nació hace poco y que acumula tanto seguidores como detractores. Y es que muchas personas se cuestionan cómo es posible que alguien viva del contenido que sube a sus perfiles de Instagram o TikTok, pero lo cierto es que esto es una realidad.
Eso sí, la mayoría de jóvenes que han hecho su carrera en las redes sociales, también se aseguran de tener otros caminos que les puedan proporcionar estabilidad económica en un futuro. Así, algunos de ellos, además de influencers, también son actores. Otros solamente han aparecido en la pequeña y en la gran pantalla por casualidad y lo suyo se queda en meros cameos.
Por ejemplo, uno de estos casos de influencers que también se han formado en el mundo de la interpretación es el de Aida Doménech. Dulceida es una de las más conocidas en nuestro país y alberga en su perfil de Instagram más de dos millones de seguidores.
Antes de hacerse famosa por las fotos que subía a sus redes sociales, la joven ya se había formado como actriz y había hecho sus pinitos. Por aquel entonces, su sueño era ser actriz y para ello estudió dos años de interpretación en Madrid y Barcelona.
En los últimos tiempos, la joven ha aparecido en distintas producciones como puede ser en la famosa serie Paquita Salas, de sus amigos Los Javis, o en la película Bajo el mismo techo. Una de sus últimas apariciones ha sido en El Internado: Las cumbres, donde la joven interpreta a una bibliotecaria en un par de secuencias.
Otro influencer que se está labrando una carrera en el mundo de la interpretación es Álvaro Mel. Este joven salmantino no llega a las cifras de Dulceida, pero sí que es cierto que acumula casi un millón y medio de seguidores. Este estudiante de Arquitectura también dedica su tiempo libre a la interpretación. Así, ha participado en distintas miniseries y, ahora, está grabando una superproducción de la mano de Alejandro Amenábar.
Aunque eso sí, no quiere descuidar el contenido que sube a sus redes sociales desde hace casi más de ocho años. “Empecé a crecer muy rápido en Instagram, a partir de los 70/80k seguidores empecé a conocer fotógrafos y a trabajar con algunas marcas. Desde ese momento empecé a ver factible la posibilidad de dedicarme a ello profesionalmente”, comentó en una entrevista.
Sí que es cierto que dar el salto al cine no siempre será fácil y, por eso, muchos influencers no paran de intentarlo en la televisión. En este es el caso, por ejemplo, de Pelayo Díaz, quien se convirtió en todo un icono en el programa Cámbiame. Por aquel entonces, el joven ya había abierto su propio blog de moda y estaba trabajando en sus redes sociales. Lo cierto es que el programa presentado por Marta Torné fue la lanzadera perfecta para que todo el mundo le conociera. Ahora, se encuentra entre los influencers más influyentes del mundo y acumula en su perfil de Instagram, donde es más activo, más de un millón de seguidores.
En otro programa de Mediaset también apareció otra influencer, Madame de Rosa. La influencer, que cuenta con más de 600 mil followers, comenzó su andadura en televisión con menos repercusión. Ahora, ha sido su estilo original y desenfadado lo que ha hecho que se convierta en una de las jóvenes con más influencia de nuestro país.
Así, Ángela Rozas, su verdadero nombre, participó en Quiero Ser y ejerció de jueza y maestra instruyendo a distintas jóvenes influencers en potencia. Lo cierto es que ya hace tiempo que no la vemos aparecer por televisión, pero sigue siendo muy activa en su perfil en las redes sociales.
Una influencer que dio el salto a la televisión fue Alma Obregón. En el año 2010 abrió su blog de recetas mientras realizaba su tesis doctoral en Alemania. Así, cuando fue ganando más adeptos comenzó a retransmitir sus postres a través del canal Divinity, donde explicaba a todo el mundo cómo realizaba su receta infalible de los cupcakes. Ahora, tiene en su perfil de Instagram más de 300 mil seguidores, que siguen las aventuras de la pastelera y de sus tres hijos, Bruno, Lola y Chloe.