Hace ya varios años que el de Álvaro de Luna ha pasado a ser uno de los nombres imprescindibles de la música pop en español. Desde que saltase a la fama con Sinsinati hasta su carrera en solitario, que le ha valido numerosos éxitos y reconocimientos. El último de ellos lo obtuvo ayer en LOS40 Music Awards Santander 2024, el de Mejor colaboración, junto a Marlon, por 'Olvidé olvidarte'. El sevillano fue, un año más, uno de los grandes protagonistas de la que es la principal cita musical española de la temporada. Con él pudimos hablar antes de la gala sobre, entre otras cuestiones, su proyección mediática y el interés en su vida personal.
En la pasada edición, de Luna fue uno de los triunfadores de la noche, al alzarse con el galardón a Mejor canción por ‘Todo contigo’, que interpretó en directo sobre el escenario del madrileño WiZink Center. Doce meses después, Álvaro ha repetido en eso de actuar (cantando, además de con Marlon, en solitario 'Nuestra canción') y de recibir reconocimiento: en este caso, por la citada colaboración con Marlon, uno de los tres premios a los que aspiraba en esta edición, muy marcada por su carácter solidario para apoyar por los afectados por la dana en Valencia y otras zonas. “Estoy orgulloso de la cantidad de peña buena que hay en el mundo”, ha comentado sobre el papel de los voluntarios al micrófono de Divinity.
Pero, además, ha habido otro motivo por el que el cantante tuvo el foco de una manera especial anoche. Un año después de su ruptura, por primera vez coincidía en un evento con Laura Escanes, su expareja, atendiendo ambos a los medios de comunicación a apenas unos metros de distancia el uno del otro durante la alfombra roja.
El andaluz se encuentra inmerso en nuevos proyectos, con dudas sobre su lanzamiento debido a la mencionada tragedia. Todo ello, semanas después de haber cumplido los treinta años, el pasado mes de septiembre. Aunque sigue considerándose "igual de idiota" pero con un año más, cree que no ha cambiado de prioridades ni ha sido lo traumático que podía esperar. Y tampoco cree que la experiencia de los años le haya hecho cohibirse y dejar de hacer cosas que hacía, ahora que es más personaje público que antes.
"Creo que hay que ser natural, a mí me gusta ser natural y por eso creo he llevado tan mal la presión mediática cuando se ha dado mucha importancia en un momento determinado a mi vida personal", ha explicado el sevillano, que reconoce que se trataba de una situación nueva, a la que no estaba acostumbrado. "Es algo que para mí fue un poco intenso, porque yo soy conocido pero sigo haciendo las mismas cosas, o lo intento, no me apetece privarme de tomar cañas con mis colegas o ir a un bar".
De Luna sí entiende, en cualquier caso, que es un tema que gestiona mejor que antes. "Para mí era un trago superamargo y ahora es como que me he habituado", ha admitido, explicando que finalmente ha aprendido a lidiar con el interés en su faceta privada aunque prefiera que sea la profesional la que reciba el foco.
Suscríbete a la newsletter de Divinity y recibirás toda la información de celebrities y corazón cada semana en tu mail.