Estamos ante un cambio de era en la trayectoria 'royal' de Victoria Federica. Dos acontecimientos simultáneos se han convertido en una declaración de intenciones sobre lo que pretende conseguir la hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar de cara a su futuro. Un salto al primer plano mediático que se ha confirmado de manera definitiva con su asistencia a los Elle Style Awards, la fiesta más vip desde que comenzamos a salir de la pandemia, no solo por lo nutrido de su convocatoria o por ese momentazo de Sharon Stone recibiendo una camiseta del Betis de manos de Joaquín, como te enseñamos en el vídeo. También por haber logrado que la sobrina del rey Felipe VI haya posado por primera vez sobre una alfombra roja. Y parece que no será la última.
Hace un par de días, su nombre copaba titulares (una vez más) por hacer público su perfil de Instagram. Un paso que muchos podrían ver como inocente si nos atenemos a la forma de gestionar su fama que han tenido otras 'hijas de' de su generación. Pero el hecho de que ella forme parte de la familia real, aunque sea de forma tangencial si tenemos en cuenta que los reyes optaron por cerrar su círculo a ellos y sus hijas, Leonor y Sofía, hace que esto cobre más importancia de lo habitual.
Tras años siendo carne de paparazzi, reivindicándose como la 'trendsetter' de la familia, ejerciendo de madrina de honor de la Feria de Sevilla, colándose en los stories de sus amigos influencers y saliendo y entrando junto a Jorge Bárcenas, su novio DJ, el hecho de que veamos a Victoria Federica en un photocall confirma que no busca el anonimato y que pretende hacer su propio camino en esto mundo y labrarse una carrear como influencer más allá de su segundo apellido. Más ahora que se ha independizado y ya no depende tanto de sus padres, algo que ha traído polémica estos últimos días:
Para este momento tan importante en su trayectoria, la hermana pequeña de Froilán ha apostado por su diseñador de confianza, ese que hizo que su madre, la infanta Elena, fuese vista como un icono de estilo cuando la vistió para la boda de Victoria de Suecia con ese vestido rosa capote con torera. Y sí, hablamos de Lorenzo Caprile, modista asiduo en Zarzuela que promete repetir su éxito con la sobrinísima.
En esta ocasión, saliéndose del clásico rojo con el que ha hecho marca, Caprile ha confeccionado junto a su equipo un vestido terciopelo azul que se ajusta a su silueta, con hombreras de punta y pierna al aire a lo Angelina. Para no eclipsar lo imponente del diseño, a juego con sus stilettos, la joven de 21 años ha apostado por un beauty de noche, igual que el peinado, recogido en una larga coleta.