Las personas que son más espirituales sienten una gran curiosidad por ramas como la astrología y la numerología, pero mientras que la primera es más frecuente y gracias a eso sabemos más sobre ella y sobre cómo afecta a nuestras personalidades y vidas, no es tanto lo que se sabe de la numerología, una guía que nos ayuda a encontrar el camino que debemos seguir en la vida, que nos da herramientas para saber dónde estamos y por qué y las opciones que tenemos por delante.
La numerología es una disciplina que se centra en el estudio de la relación entre números, letras y patrones, se emplea para poder conocernos un poco mejor a nosotros mismos, pero también a los demás y la forma en la que nos relacionamos con el mundo, ayuda a conocer nuestros verdaderos deseos y también cómo conseguirlos, aclarar nuestras emociones, sentimientos y relaciones pasadas y cómo todo eso se refleja en el presente y puede llegar a afectar a nuestro futuro.
Dentro de la numerología existen números que pueden marcar algunos aspectos de nuestras vidas, como el número de nacimiento, que es aquel que depende del día en la que hayamos nacido y puede ser el número en sí o, en caso de haber nacido en un día que corresponde a un número de dos dígitos, sumando ambos (por ejemplo, será el siete si hemos nacido un día siete, pero si se nació el catorce, el número de nacimiento será el cinco).
También existe el número de misión de vida, que está relacionado también con nuestro nacimiento, pero en este caso con la fecha concreta. El proceso para calcularlo es similar al anterior mencionado, sumando los dígitos del día, mes y año de nacimiento hasta obtener un número entre el uno y el nueve. Hay diferentes números que son importantes en la numerología y que ayudan a comprendernos un poco mejor y a aprender qué esperar de la vida.
El número 1 en numerología se asocia con la singularidad, pero también con la independencia y el inicio de nuevas fases, cuando aparece el 111 lo que sucede es que esas energías se amplifican, en concreto se triplican. La parición de este número se suele asociar con una llamada de atención, es una señal para confiar en uno mismo y hacer todo lo que esté en nuestra mano para poder cumplir metas y objetivos.
Encontrarse habitualmente con el número 111 es una señal de que nuestros pensamientos están en proceso de manifestarse, pero no es el único significado que se le atribuye, también marca el inicio de nuevos proyectos, de nuevos ciclos, y un aliento a confiar en uno mismo en la propia intuición porque es visto como un mensaje de las guías espirituales mostrando apoyo en el camino que se está a punto de comenzar.
Si el número 111 comienza a ser habitual en nuestras vidas, lo mejor es mantenerse positivo, definir nuestras metas, deseos y objetivos y confiar en nuestra intuición.