Hace justo una semana, Paula Echevarría protagonizaba su primer photocall tras ser madre. Este era el claim de su último acto público, que suponía su reaparición ante los medios después de un año de muchos cambios. El principal, haber dado a luz a su segundo hijo, el primero que tiene con el futbolista Miguel Torres. Y de eso habló en exclusiva para esta web, de lo que ha supuesto para ella este tsunami que es criar a un bebé más allá de los cuarenta. Con todo lo que eso implica.
Nada más hacer acto de presencia, la actriz espetó con sorna que jamás habría posado justo después del parto, momento en el que pesaba 25 kilos más y que ha logrado perder gracias a un sacrificado proceso de recuperación del que nos hizo partícipes durante nuestra conversación.
Al preguntarle por las cuatro claves de esta evidente transformación de la que Echevarría nos ha ido haciendo partícipes a lo largo de estos largos siete meses, la asturiana no titubeó: “En mi caso ha sido alimentación, ejercicio, algunos tratamientos dentro de lo que es tener un bebé recién nacido”.
Con nuestro compañero Torito, en otra entrevista para ‘Viva la vida’, Paula fue aún más concreta y confesó que llevaba cuatro meses “sin probar un mísero espagueti”. Incluso le declaró la guerra al “hidrato”. Con respecto al deporte, prácticamente no ha habido día que no hayamos tenido el correspondiente story dando fe de sus esfuerzos. La maderoterapia o la criolipólisis han sido un must cada vez que ha pasado por Tacha, su centro estético de confianza. Por no hablar de la paz que aportan esas instantáneas madre e hijo que publica junto al pequeño Miki.
De esto último, del relax con el que se ha tomado Paula Echevarría esta segunda maternidad que ha llegado doce años después del nacimiento de Daniella Bustamante, su hija menor, también nos habló en nuestra entrevista. “La maternidad a los 30 es diferente que a los 40. No te puedo decir que sea ni mejor ni peor, pero es más calmada, más tranquila”, nos confesó.