Durante el embarazo habrá que tener especial cuidado con todo aquello que consumimos. Por eso, puede ser que nos preguntemos qué medicamentos podremos tomar y cuáles no. Y para salir de dudas, lo mejor será consultarlo con un profesional para no dañar la salud ni de la madre ni del pequeño. Una de esas dudas a resolver, en épocas de alergia, será el uso de antihistamínicos. Pero, ¿será posible tomarlos si estamos embarazadas?
Lo cierto es que los síntomas de la alergia pueden ser muy variados y, por tanto, la gravedad cambiará según nos expongamos a ello. Habrá casos en los que no solamente nos encontraremos con estornudos o picor, sino también con tos o irritación ocular que pueden ser especialmente molestos y pueden afectar a la vida de los pequeños.
Los expertos explican que la mayoría de antihistamínicos no están recomendados durante el embarazo. Por tanto, aunque en algunas ocasiones la alergia sea especialmente molesta, lo más importante será controlar los síntomas. Por ejemplo, en el caso de que suframos dermatitis, siempre podremos optar por algún tratamiento que sea menos agresivo. Aún así, será durante esos primeros meses de embarazo cuando el médico será más estricto en cuanto al consumo de este tipo de medicamentos.
Lo más recomendable será que no arriesguemos nuestra salud ni la del pequeño por los antihistamínicos. Así, se podrán usar broncodilatadores e inhaladores, que serán fundamentales cuando tengamos alguna complicación para respirar. También, para la nariz taponada podremos aplicar un poco de ácido linoleico, que nos aliviará la secreción nasal.
Para aquellas personas que presenten eccemas también estará recomendado la vitamina B12, que controlará algunas reacciones en la piel como puede ser la dermatitis. Otra buena opción será el uso de vitamina C.