En 2010, dos años después de haber saltado a la fama gracias a su paso por 'Mujeres y hombres y viceversa', Tamara Gorro comenzó una relación con Ezequiel Garay. De ella nacieron los dos hijos de la pareja, Shaila y Antonio. La influencer ha sido muy clara en todo este tiempo al respecto de los problemas que experimentó al intentar ser madre. Su primogénita, de hecho, fue concebida mediante gestación subrogada debido a dichas complicaciones, aunque la pareja sí podría tener a su benjamín de forma biológica un par de años después. En 2018, dio a conocer que había iniciado un proceso de adopción de cara a una tercera maternidad. Ahora se ha sincerado al respecto de si lo intentará en solitario.
Apenas seis meses después de haber dado a luz a su hijo pequeño, que recibió el nombre de un amigo de la pareja fallecido por entonces, Tamara desveló que Ezequiel y ella se encontraban inmersos en un procedimiento para poder adoptar y formar así una familia numerosa. Lo hizo durante una entrevista al exlíder de Ciudadanos, Albert Rivera, en la que tanto la extronista como el expolítico reivindicaron la necesidad de agilizar los trámites de estos procesos familiares. "En África, China, en Argentina. Me da igual. Pero, ¿por qué no puedo hacerlo aquí?”, reflexionaba entonces.
Hace ya más de un lustro de aquel anuncio. El proceso se paralizó en 2020. La propia Tamara se sinceró al respecto, reconociendo que, a una semana de conocer al que hubiese sido su tercer hijo, Ezequiel y ella decidieron echarse atrás. ¿El motivo? Se les solicitó un dinero sin justificación alguna que optaron por no pagar. La falta de confianza que les generó la situación impidió que el clan se volviese a ampliar. Pero recientemente, su "familia virtual", esa comunidad de seguidores que la acompaña en su día a día, le ha vuelto a preguntar por la cuestión.
"¿Has desistido en la idea que tenías de adoptar?", ha querido saber uno de sus followers. Tamara ha explicado en detalle por qué ha tomado la decisión de no seguir adelante con ese deseo y dar un hermanito o hermanita a Shaila y Antonio. "Por desgracia sí... siempre tendré esa espinita en el corazón", ha reconocido la madrileña. Además, se ha sincerado respecto de los motivos por los que ha desistido de la idea.
Según sus palabras, los impedimentos del proceso han sido clave en la decisión. "No lo facilitan absolutamente nada. Ya lo viví". Al mismo tiempo, ha valorado cómo hubiese sido afrontar una nueva maternidad en solitario, toda vez que a finales de 2022 se confirmó su separación definitiva de Garay, con quien sigue teniendo una relación estrecha. "Ahora lo tendría que tener sola, y no me importaría nada, pero creo que sería mucho más inviable a la hora de poner obstáculos", admite.