Uno de los momentos más especiales del año es la Navidad y más aún si es la primera fiesta de este tipo de nuestro bebé. Por eso, es muy probable que lo recordéis el resto de vuestra vida y, por tanto, habrá que hacer todo lo posible para que sea lo más extraordinario y bonito posible. Lo mejor será que, primero, sigáis una serie de recomendaciones en cuanto a su sueño, alimentación o la seguridad de la casa para, luego, poder disfrutar del resto.

Si se acerca el 24 de diciembre y tu bebé tiene pocos meses o acaba de nacer será muy importante no alterar sus rutinas de sueño. Por eso, es muy probable que ese año, las celebraciones se desarrollen en pequeños grupos, sin ruido o jaleo propio de esas fiestas y que podrán llegar a afectar al bebé. También, en el caso de que esta celebración se realice en un lugar que no sea vuestra casa, lo mejor será que el pequeño tenga un espacio donde pueda descansar tranquilamente y sin que nadie le moleste.

Además, sí que es cierto que, cuando escuchan más ruido del que están acostumbrados, pueden irritarse con más facilidad. Por lo que la calma será lo que más buscarás. También, habrá que tener mucho cuidado con todo lo que come el bebé en las fiestas, ya que no podrán tomar frutos secos, dulces o la mayoría de productos que tomamos en Navidad. Por tanto, la alimentación debe ser mucho más sencilla y será muy recomendable mantener sus horarios habituales de comidas y cenas.

También, tendrás que tener en cuenta que cualquier cosa que se encuentre en su camino puede llevársela a la boca. Por lo que, como padres, tendréis que estar pendientes de estas cosas. Una vez que ya tienes todo esto en mente será el momento de disfrutar de la Navidad. Una buena idea para acordarse de esas Navidades para siempre es realizar o comprar un adorno navideño personalizado. Además, si las manualidades no son tu fuerte siempre podrás encontrar un lugar donde hacerte con uno. Lo mejor será que en el adorno ponga la fecha, el nombre del bebé y, también, algún que otro detalle más.

Será muy recomendable, también, que organicéis una sesión fotográfica. Esta será la mejor forma de dejar constancia de esa Navidad tan especial. Además, podréis elegir si queréis haceros unas fotos en familia o, en cambio, solamente al pequeño. Así, podréis disfrazar al bebé de Papá Noel o de un muñeco de nieve, así como de elfo o lo que más te guste.

También, podréis optar por crear nuevas tradiciones para ese día. Es decir, podéis comenzar a hacer algo, con la ayuda de vuestro pequeño y en su compañía, que sea novedoso. De esta manera lograréis crear una identidad nueva. Aunque eso sí, si queréis decantaros por algo más de ‘andar por casa’ siempre podéis establecer ‘el día de los crepes’ o ‘la noche de maratón de películas Disney’.

Otra buena opción será llevar a tu pequeño a que conozca a Papá Noel o a los Reyes Magos. Sí que es cierto que, probablemente, sea muy pequeño y no se entere de lo que está sucediendo. Pero, así, podréis tener vosotros también una imagen más navideña y una fotografía que os trasladará para siempre a ese momento.

Además, otra buena idea para que ese recuerdo quede para siempre será mandar una bonita felicitación navideña. En ella, como no podía ser de otra manera, el protagonista será el bebé. Así, podréis enviarla a todas las personas que queréis y que, también, podrán decorar su casa con esa fotografía. Será muy importante que vosotros os quedéis con una copia para que podáis guardarla para la posteridad. En las fotos será muy importante que el niño aparezca vestido con algún atuendo propio de la Navidad y, también, que pongáis la fecha y la edad del pequeño.

Hay muchos padres que deciden hacer esta fotografía y mandarla todos los años para tener constancia de la evolución del pequeño. Así, todo el mundo podrá ver claramente cómo va cambiando el bebé.