Es normal que, durante las primeras semanas de embarazo, la mujer sufra náuseas. Esta es una de las molestias más comunes y lo mejor será seguir una serie de recomendaciones para atajarlas. Sí que es cierto que estas no pondrán en riesgo el embarazo, pero sí que harán que la mujer se encuentre mal.
Las náuseas serán más habituales durante el primer trimestre de la gestación, pero en algunas ocasiones pueden extenderse hasta el final de la gestación. Lo cierto es que el médico podrá recomendar algunos medicamentos, aunque sí que es verdad que siempre podrás seguir una serie de recomendaciones caseras.
El jengibre es uno de esos productos que pueden venir bien para estos casos. Se trata de una planta y su parte más utilizada suele ser el tallo o el rizoma. Además, tiene un color café y la pulpa blanca con un aroma más cítrico y puede ser que algo picante. La raíz tiene una infinidad de propiedades, como antiinflamatorias y anstieméticas, es decir, contra las náuseas.
Esto es porque las propiedades del tallo actúan en el tracto gastrointestinal reduciendo esa sensación tan desagradable y, sobre todo, esas ganas de vomitar. También, es un buen antioxidante y es una gran fuente de vitaminas, como la E y la B. Además, aporta algunos minerales como selenio, potasio, hierro, magnesio y zinc.
Pero, entonces, ¿será recomendable el jengibre para aliviar esas náuseas? Son varios los estudios que apuntan a que esta planta puede aliviar las náuseas durante la gestación. Así, este es considerado una opción inofensiva y más efectiva para aquellas personas que sufren náuseas. Aunque eso sí, puede provocar diversos efectos adversos, como puede ser la acidez, la irritabilidad estomacal, mal aliento o gases.
Una vez que tengas claro que quieres tomar jengibre podrás encontrar varias opciones para ingerirlo. Una de las más comunes es tomar esta planta en té. Para ello, podrás comprarlo o hacerlo tú misma. Para fabricarlo deberás cortar unos pequeños trozos o rallar jengibre y hervirlo con medio litro de agua. Luego, se tendrá que dejar reposar durante unos cinco minutos.
También, podrás hacerte una limonada de jengibre con cinco limones, medio litro de agua, 100 gramos de azúcar, hielos y un poco de jengibre. Además, podrás tomar galletas de jengibre, bizcocho o jengibre confitado. La forma de ingerirlo dependerá de lo que más te guste.