Malú, de Albert Rivera como padre: "Cuando la niña lloraba, yo le daba un codazo a él"

Han pasado quince meses desde que Malú y Albert Rivera anunciasen públicamente el nacimiento de su primera hija en común. Debido a la expectación que había generado el embarazo de una de las cantantes españolas más conocidas, fue la propia pareja quién publicó a través de sus redes sociales una fotografía del pie de la pequeña Lucía. "Te acompañaremos en tus pasos toda la vida", aseguraron entonces. Ahora, un año después de convertirse en madre, la artista ha concedido una entrevista a Mujer Hoy en la que habla de su lado más familiar e íntimo junto a Albert Rivera.

Malú ha comenzado explicando que hacía "mucho tiempo" que sabía que quería ser madre. Pero a raíz de comenzar su relación con el exlíder de Ciudadanos, en diciembre de 2019 hicieron pública la noticia de su embarazo tras los rumores que ya habían salido a la luz. "Una vez más gana el amor", declararon en aquel momento. Y desde entones, la vida de la artista ha sufrido "un cambio radical". "Pasas de preocuparte solo en ti a prácticamente no existir, solo existe tu hija. Ya no me miro al espejo y realmente no me importa. He pasado a un segundo plano y me he quitado un montón de gilipolleces de sopetón", ha contado al medio citado anteriormente.

A pesar de que hace 15 meses que no sabe "lo que es dormir cuatro horas seguidas", la cantante siente que no hay "nada comparable" a tener un bebé. Ella misma lo define como "la inspiración más pura".

La realidad de la paternidad para Malú y Albert Rivera

Poco después de que naciese la pequeña Lucía, el que fue líder de Ciudadanos bromeó en una entrevista sobre "hacerse el dormido por la noche" para no cambiar un pañal. La cantante, siguiendo la broma que su pareja comentó hace tiempo, ha respondido que con ella "no podría hacerse el dormido" y que normalmente se turnan para atender a su hija durante la noche y que uno de ellos pueda descansar.

"Durante los primeros meses, cada vez que lloraba la niña yo le daba un codazo y él pegaba un brinco. '¿Qué hago?', preguntaba. Y en realidad poco podía hacer, porque la que tenía que dar el pecho era yo, aunque quería que estuviera ahí para ayudarme", recuerda la artista, que ha definido a Albert Rivera como "un padrazo" y que no tiene queja.