Cuatro alternativas a tus vaqueros para ir cómoda, fresca y a la moda en verano

Con el cambio de estación los días se alargan, las temperaturas suben y apetece apostar por prendas que se vean más ligeras y con una paleta de color más alegre en comparación con la de los meses precedentes. Llega también el cambio de armario, un momento tan amado como temido en el que llevar a cabo la selección de lo que se va a incluir y lo que no, supone un verdadero quebradero de cabeza para muchas.

El buen tiempo invita también a buscar opciones más frescas y cómodas con las que afrontar el calor que van más allá de los vaqueros. Porque por mucho que se trate de la prenda más versátil del armario y encontremos una variedad de tejidos denim bastante amplia, quizás no sea las más adecuada en esta época del año.

Es tiempo de monos, faldas, vestidos… Piezas cargadas de movimiento, y en la medida de lo posible, no ocupen mucho espacio en la maleta ni haya que planchar. Requisitos muy útiles de cara a las escapadas de fin de semana. Ahora bien, las que deseen incorporar a su vestidor alguna prenda nueva, en las alternativas que se proponen a continuación se puede ir fresca y cómoda sin perder la elegancia.

Un básico que no falla y que ahora más que nunca se lleva en versión midi o XXL. Perfectas cuando se quiere lucir pierna y no se está muy bronceada todavía. A la hora de elegir el modelo que mejor se adapte a ti, los diseños de línea A -ajustados en la cintura pero sueltos en la parte de las piernas- contribuyen a que se vea una figura más estilizada o se cree el efecto visual de una silueta más curvilínea. Los modelos de punto, denim o con plisados son algunos de los favoritos este año. Combínalas con una camisa de algodón o una camiseta básica y añade unos zapatos planos o unas zapatillas blancas para look chic a la par que casual.

Ideales en los días más cálidos. Estamos ante un tejido natural, ligero, transpirable y muy confortable que permiten moverse con facilidad sin pasar calor. Puedes optar por los patrones más rectos o los de corte oversize -dos de los más populares y que favorecen a todo tipo de cuerpos- con estampados XXL o lisos en tonos potentes. Lúcelos con una blusa XXL para un estilismo relajado o bien un top encorsetado en un look más sensual junto con unas sandalias joya. No falla.

Una prenda muy versátil que puede cambiar de contexto fácilmente en función de los accesorios que se le añadan. Se puede elegir un diseño en un tejido fino como el lino o el algodón para llevarlo por el día con cuñas o deportivas; y un diseño largo en acabado satinado con accesorios un cinturón que contraste para un outfit nocturno. Para dar con los modelos que hagan una figura más esbelta, lo más acertado es decantarse por los que tengan hombreras y cintura marcadas, y la pernera ligeramente ancha.

Y cómo no, no podía faltar una mención especial a los vestidos. Una opción femenina y versátil que ofrece un sinfín de posibilidades independientemente del estilo que se tenga. Los más frescos siempre serán los de corte fluido y tipo camisero, que conjuntados con unas alpargatas o unas sandalias de tiras finas darán lugar a un outfit todoterreno.

No olvides adaptar estas alternativas a tu ritmo de vida, recordando siempre que la clave para ir cómoda reside también en la seguridad que se tenga en una misma, y no hay nada mejor que hacerlo con prendas que amolden completamente a ti.