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Una entrevista de trabajo es uno de esos momentos que exigen prestar una atención completa. Más allá del currículum, tienes que ser muy consciente de los que dices, de tu expresión corporal y, por supuesto, tienes que elegir muy bien la manera en que te vistes para dar una imagen adecuada porque quienes te entrevistan es lo primero que van a ver de ti.
La entrevista es el paso previo que te puede dar acceso al puesto al que aspiras, así que una buena estrategia para acertar con el look es pensar en cómo te vestirías si ya estuvieras trabajando. Otra recomendación para elegir el estilismo más adecuado es evitar que la ropa te robe el protagonismo y, muy importante, que sea adecuada para el tipo de empresa al que aspiras.
No es posible aconsejar cómo vestir para una entrevista de trabajo en cada sector laboral, es cierto que no es lo mismo un puesto relacionado con las artes visuales, que otro vinculado con la banca, pero en general, si te acoges a estas sugerencias no vas a desentonar en ninguno.
La ropa debe reflejar quién eres, pero recuerda que tu objetivo es conseguir un trabajo y no hay nada malo es que te acojas a ciertas reglas de estilo. La ropa que elijas tiene que ser cómoda y hacerte sentir segura y, algo que parece obvio, que sea de tu talla, que esté impecablemente limpia desde los zapatos hasta el cuello y bien planchada. Además, para este tipo de situaciones se debe aplicar el menos, es más: menos accesorios, estampados e incluso maquillaje harán que se te vea más a ti.
Otras sugerencias que te pueden ayudar a elegir, aunque algunas resulten obvias, es que evites la ropa deportiva (sí, sabemos que hay excepciones), los escotes, las minifaldas y los shorts. En definitiva, se trata de dar una imagen profesional.
De la teoría pasamos a la práctica con algunos ejemplos de looks que no fallan para dar una buena imagen en una entrevista de trabajo, que es el mejor modo de encontrar inspiración para ese momento que puede cambiar tu vida.
El pantalón vaquero puede ser un gran aliado, pero elige un modelo que no sea demasiado ajustado, ni de patrón oversize. Combínalo con una blazer o una americana de lino en verano y escoge un zapato adecuado que puede ser un mocasín, unas bailarinas o un tacón cómodo. Si vas a elegir algún complemento, que sea discreto.
Otra opción es elegir un pantalón de pinzas holgado, que en verano puedes llevar con una camisa, en otoño con chaqueta y en invierno con abrigo. Juega con la psicología del color y apuesta por colores lisos y los tonos neutros si buscas dar una imagen de serenidad, los azules para aparentar seguridad o los verdes para transmitir armonía.
Un vestido, ya sea un camisero o un modelo minimalista, también es una muy buena opción para una entrevista de trabajo, además puede ser una declaración de intenciones porque es la mejor manera de ir impecable sin necesidad de perder demasiado tiempo y eso refleja que eres una persona práctica que busca soluciones inteligentes.
La combinación de blanco y negro no falla, así que utiliza esta fórmula para crear tu look de entrevista de trabajo, ya sea con pantalón, camisa y americana, con falda y jersey o con un vestido y un abrigo en los días más fríos. Dirán mucho de tu manera de enfrentarte a los grandes retos.