Los bolsos, como la ropa, también cambian de temporada. Los principales diseñadores ya han ofrecido sus propuestas para esta primavera 2020 y en Divinity hemos prestado mucha atención para mostrarte cuáles son los bolsos que vas a querer llevar con todos tus outfits.
Lo que más nos ha gustado de ellos es que no tenemos la sensación de que se trate de tendencias que vayan a desaparecer cuando acabe el verano y que es posible que con algunos de ellos ya cuentes. Algunos te serán muy útiles y otros te resultarán el complemento ideal en ocasiones señaladas. Pero lo cierto es que nos gustan todos y aquí te ofrecemos algunas ideas que pueden convencerte, o bien servirte de inspiración para dar con lo que realmente buscas.
Los bolsos se llevan más grandes que nunca. Empezando por el shopper clásico, hasta modelos más veraniegos, bolsos deportivos, etc. Así lo ha prescrito Bottega Veneta en sus últimos desfiles y así lo ha confirmado el street style. El más estándar está fabricado en piel y tiene el asa larga, pero también nos encantan otras posibilidades como este estampado que propone Zara.
Imita a la piel de cocodrilo y ha sido una de las propuestas de Prada, a la que se han sumado Chloé o The Kooples. Puede convertirse en tu objeto de deseo, porque el mundo de la moda lo ha convertido en el nuevo animal print, y su mejor embajador es el bolso. Se le conoce ya como el “efecto coco” y no te resultará nada complicado encontrar modelos como este de Stradivarius.
Loewe ha dado alas a sus bolsos llenándolos de plumas. Lo cierto es que las plumas convierten a cualquier bolso en una pieza muy especial, y este nos ha parecido una apuesta segura, por su tono rosa primaveral, y porque podrás conservarlo durante mucho tiempo con ese diseño de fiesta tan atemporal que tiene.
Es una tendencia que viene y va, y este año le toca. Los bolsos de flecos van a estar en la primera línea de la moda y tanto Balenciaga como Celine así lo han demostrado. Un bolso con flecos imprime un toque “boho” muy primaveral a tus estilismos con un cierto encanto retro añadido. Los flecos pueden funcionar como un ligero toque añadido al bolso o tener todo el protagonismo, como ocurre con este modelo que hemos seleccionado.
Primavera y naturaleza caminan de la mano, y diseñadoras como Stella McCartney lo saben. Materiales como la rafia, el mimbre o la yuta sirven para el diseño de bolsos que nos conectan con nuestra esencia más libre y natural. Aunque son perfectos para los looks más desenfadados, según su diseño puedes incorporarlos como el complemento perfecto a cualquier outfit.
La primavera es una explosión de color también en la moda, o sobre todo en ella. Los colores neón nos preparan el ánimo para todo lo que tenemos por vivir en los días de sol y calor, y nada mejor que un bolso en un tono vibrante para alegrarnos el día (o la noche). Valentino ha sido un defensor de esta tendencia y nos ha convencido por completo.
No hay nada tan femenino y sofisticado como un bolso de mano. Es difícil no sentirse como una auténtica diva del cine clásico caminando con uno de ellos por la calle. Marc Jacobs así lo ha pensado y lo ha elegido como complemento en sus desfiles, y las más entendidas en moda cuentan con un bolso de mano tipo sobre para impulsar cualquier estilismo que se tercie.
La bandolera lo tiene todo: el tamaño perfecto, es cómoda de llevar y las hay con todo tipo de formas. Son elegantes y todoterreno, por eso hay que contar con al menos una en nuestro armario, y las principales marcas de moda nos lo ponen muy fácil.
Pero como todo buen clásico, la bandolera se redefine temporada tras temporada y esta primavera 2020 el diseño más original será este en forma de bandolera triple. Tres bolsos de diferente tamaño en uno solo, para que organizar dónde quieres guardar cada cosa sea más sencillo y estiloso que nunca.
Al otro extremo de la bandolera triple se encuentra la bandolera mini que llega dispuesta a arrasar. Para cuando quieres salir de casa con poco más que las llaves y la cartera y no quieres andar preocupada por dónde poner el bolso, ya que este modelo se integra en tu estilismo como una pieza más de la que no tienes por qué desprenderte en ningún momento.