Asier Etxeandia tuvo claro “desde pequeño que iba a ser artista, que iba a cantar y que iba a llenar el escenario”. Y alcanzó sus metas. Una infancia “no muy agradable”, que estuvo marcada por el bullying que recibía por parte de sus compañeros y profesores en la escuela, le impulsó a luchar por su sueño: “Lo único que me salvó era soñar que algún día sería artista”.
Lo que vino tras su dura adolescencia fueron años de “libertad, inocencia y bohemia” que le sirvieron de aprendizaje. Desde que en 1995 rodase su primer largometraje para la gran pantalla no ha parado de trabajar. De hecho, puede presumir de ser ‘Chico Almodóvar’. Y con recursos para dar y tomar. Si el teléfono no suena, él se busca las mañas. Prueba de ello es ‘Factoría Madre Constriktor’, productora que creó con José Luis Huertas, su pareja.
En sus redes sociales poco se puede encontrar del otro, salvo en fechas marcadas a rojo en el calendario. Juntos celebran ahora que han alcanzado los 18 años de amor y discreción. Y Asier no ha perdido esta oportunidad para compartir una foto junto a su chico en su cuenta oficial de Instagram, acompañando esta tierna imagen con un romántico texto que evidencia lo enamorado que está de su marido.
“Mi alegría y mi dolor, mi familia y mi hogar. Mi esperanza, mi ilusión. Impecable espejo de penas y de amor. Nada importa, todo es grande. Nadie sabe, solo tú y yo. Que no te falte de nada. Que no te baste mi amor. Que no hay manual de cómo se hace. Mientras tanto aquí tú y yo, tu risa, tus ojillos y tu piel, mi alimento y mi inyección. Y me pongo así, poeta, cuando pienso en los dos. En los que nos queda por delante, si lo ves cómo te veo yo”, se abría en canal.
Pese a que no son muy dados a hacer públicos momentos de su vida íntima, no es la primera vez que presumen de su relación. “El amor es para los valientes”, escribía el actor hace unos años en una de sus escapadas a la capital de Inglaterra. Pero, sin duda, uno de los momentos que más han marcado esta historia de amor fue cuando el intérprete recibió el premio a 'Mejor actor secundario de televisión' por su personaje en ‘Velvet’. Antes de subir al escenario a recogerlo, dio un beso de película a su chico que fue inmortalizado por las cámaras.