Susanna Griso vuelve a estar enamorada. Así lo confirma ¡Hola! este miércoles en portada, donde vemos a la presentadora en actitud muy cariñosa con su nueva ilusión después de romper con el aristócrata barcelonés (y exmarido de la política Cayetana Álvarez de Toledo) Joaquín Güell. Según informa la revista, que ha seguido a la recién estrenada pareja durante una escapada romántica a Sevilla, el hombre que se ha convertido en su nuevo compañero de vida es el empresario Íñigo Afán de Rivera.
La prensa desconocía que la periodista había puesto fin a su relación anterior cuando fue fotografiada por las calles de la capital hispalense hace unos días. Rutas en bicicleta, complicidad en una de las terrazas del casco histórico, paseos agarrados de la cintura... Unas instantáneas que confirmarían el noviazgo en un viaje a dos que aprovecharon con motivo de la asistencia de ella a los Premios Escaparate.
La información que manejan los compañeros de ¡Hola! es que Susanna Griso e Íñigo Afán de Rivera se conocieron hace tres meses, a principios de verano, en aquella famosa fiesta de cumpleaños de su íntima Sandra García-Sanjuán en Malta. Rostros muy vip como Paula Echevarría, Mar Flores, Paloma Cuevas o Isabel Gemio, presentes en el evento, fueron testigos de su primer encuentro. Y también Anne Igartiburu, que merece una mención aparte.
Recordemos que la mítica presentadora de las Campanadas de la cadena pública ya fue relacionada con el nuevo novio de Griso hace unos meses a raíz de unas fotografías juntos. La revista asegura que entre ellos tan solo existe una estrecha amistad.
Pero vayamos a quién es él. En lo personal, Íñigo Afán de Rivera (Iggy para los amigos) está divorciado y tiene cinco hijos. Una situación vital muy similar a la de Susanna, que en diciembre de 2020 decidió separarse de Carles Torras, padre de sus tres hijos, después de 23 años de matrimonio.
Si analizamos su faceta profesional, su éxito como empresario se fraguó en los noventa, cuando se adentró en el sector textil y fundó su propia firma de camisetas (Iggy Ink, la llamó). Los resultados con la misma fueron tales que la revista Actualidad económica llegó a considerarle uno de los mejores empresarios del año 1999.