Alejandro Sanz no está atravesando un buen momento personal. El artista contaba hace unos días que se siente "triste y cansado" y que, a veces, no quiere "ni estar. Literalmente". Poco después explicaba que había sufrido "un brote muy fuerte" y que se había llegado a plantear cancelar la gira. Pero el pasado sábado, con ayuda de profesionales y la comprensión de sus fans, el cantante se subió al escenario de Pamplona y superó lo que para él era una auténtica "prueba de fuego".
Ese mismo día, la revista ¡HOLA! anunciaba que uno de los motivos de su complicada situación personal era su ruptura con Rachel Valdés, la artista con la que llevaba tres años de relación. Su historia de amor comenzó tras el fin de su matrimonio con Raquel Perera, madre de sus dos hijos pequeños. El medio citado adelantaba que Valdés "se fue de la casa en la que convivían" y el artista decidió poner fin a la relación hace dos semanas debido "al desgaste de la convivencia".
Sin embargo, esta noticia ha seguido dando mucho que hablar. El periodista Aurelio Manzano comentaba que "si ella hablara, abriría muchos melones" y aseguró que el caracter de Rachel no habría facilitado la relación del cantante con Raquel Perera, su exmujer. Según Manzano, la cubana y su hijo Max, que tiene 13 años, se han marchado a Barcelona tras la separación para "poner tierra de por medio". "Ha sido una guerra de titanes, una guerra de egos que terminó con una relación", insistió el periodista.
Horas después de estas declaraciones, Alejandro Sanz se ha pronunciado por primera vez sobre su ruptura con la artista. El cantante comenzaba diciendo que está "escuchando y leyendo muchas cosas" que no le gustan. Sanz ha querido dejar claro que Rachel Valdés "es una mujer increíble" a la que quiere, admira y de la que solo puede decir "cosas buenas".
"Mi estado de ánimo nada tiene que ver con ella. Pido respeto para ella y su trabajo. Cariño, tú enfócate en tu obra y sube el volumen de tu arte", ha terminado diciendo dirigiéndose a la que ya es su expareja.
Estas declaraciones llegan tan solo tres días después de que el cantante reapareciese en el escenario. En su último concierto, el primero de su gira por España, Alejandro Sanz explicó que su confesión fue porque intentó "sincerarse" y escribió lo que sentía y fue "muy bello". "Después salieron otras cosas... ruido, el ruido no es para nosotros, lo nuestro es otra cosa, muchas gracias a todos", agradecía entre los aplausos del público.
También quiso dejar claro que lo que le estaba ocurriendo "no tenía que ver con nada ni con nadie". "Es un agujero que se te hace aquí (se señalaba el pecho) de repente y no sabes muy bien por qué... y desde este agujero aquí en el pecho os quiero dar las gracias, por estar ahí y por entenderme", dijo sobre el escenario.
En una charla con Sonsoles Ónega, la madre de Dylan y Alma, los dos hijos pequeños del cantante, ha explicado si estaba dolida con Valdés por el comienzo de su relación. "He intentado ordenar y colocar porque le he puesto voluntad, siempre positiva. He aceptado las cosas como me han venido, todos los que han pasado por mi vida me han enseñado una lección", ha reflexionado.