Soraya Arnelas y Miguel Ángel Herrera pasaron por el altar en junio de 2023 tras más de once años de relación. Desde entonces, ambos han formado una gran familia junto a sus dos hijas, Manuela y Olivia, aunque recientemente se vieron obligados a enfrentarse a la dura pérdida del bebé que la cantante estaba esperando. Un hecho que, sin duda, ha conseguido unir todavía más a la pareja.
A través de sus redes sociales, Soraya muestra habitualmente aspectos relacionados tanto con su vida profesional como con la personal. Ahora, ha compartido una fotografía junto a su pareja en la que ambos posan sonrientes en un coche demostrando el “súper equipo” que forman: “Mucha gente nos dice que nos parecemos, que parecemos hermanos”, ha comenzado escribiendo como pie de foto y entre risas la artista.
Con sus declaraciones ha querido hacer así referencia a los que en numerosas ocasiones han comentado sus diferentes imágenes en Instagram y han señalado la gran similitud física que existe entre ellos. Y es que, tal y como ella misma ha afirmado en la publicación, “dos que duermen en el mismo colchón, se vuelven de la misma condición… ¡Y qué verdad es!”, ha exclamado.
Para finalizar las tiernas palabras dirigidas a su chico, ha señalado que su historia de amor es “darmatika”, una palabra de la que, sin duda, sus seguidores en las redes sociales han querido conocer su significado: "¿Qué significa Darmatiko? En la rae no está”, ha cuestionado una de sus curiosas seguidoras.
Arnelas ha contestado que “en realidad se escribe ‘Dharma’: “Una pareja dharma es aquella que se une para el crecimiento de ambos a la vez y juntos”, ha afirmado, dejando ver la bonita relación que ambos han creado a lo largo de más de una década juntos.
Soraya y Miguel Ángel se conocieron en la escuela de azafatas en la que ellá había estudiado antes de dedicarse a la música. Casualidad o no, la extriunfita relató en una entrevista que, unas semanas después de su primer encuentro, tuvo un sueño premonitorio con el que se convertiría en su marido.
"Soñé que me despertaba en un campo de fútbol y en una portería había un portero vestido de amarillo, rubio, y yo solo tenía ojos para él. Cuando me desperté, sentí en el pecho como que me había enamorado dentro de ese sueño", explicó la extriunfita. Tiempo después, descubrió que Herrera había sido portero del Betis, cuya equipación era amarilla por aquel entonces.