El 3 de agosto de 2017 un fatídico accidente de quad en Ibiza acababa con la vida del 12+1 veces campeón del mundo de motociclismo, Ángel Nieto. Su muerte a los 70 años conmocionaba al mundo del deporte, a los miles de aficionados de todo el mundo y, sobre todo, sumía en un profundo dolor a su familia. Sus tres hijos y su segunda mujer fueron los que más sufrieron con este inesperado y suceso: Ángel y Pablo, de su primer matrimonio con Josefa Aguilar; y el más pequeño de todos, Hugo, fruto de su relación con Belinda Alonso.
El pequeño del clan, que hoy en día tiene 20 años, mantiene una relación con una joven llamada Iva Jay, con la que ha posado en varias ocasiones en sus redes sociales: abrazándose, intercambiando gestos cómplices, coqueteando o conociendo mundo juntos. Hugo ha encontrado la estabilidad al lado de esta desconocida y atractiva chica, con la que compartiría un sinfín de gustos y aficiones.
Hugo, que sentía verdadera devoción por su padre (“Siempre he sido consciente de que era especial, un genio”), no está dispuesto a convertirse en otra leyenda del motociclismo, pese a que adora este ambiente. “De pequeño iba haciendo ‘rum, rum’ con una moto que me regaló Fonsi Nieto, pero al final me decanté por el tenis”. Tal es su pasión por las raquetas que llegó a estudiar Bachillerato en la Academia de Rafa Nadal, pero actualmente vive su amor en Estados Unidos, donde estudia Finanzas gracias a una beca que le concedieron para jugar a este deporte.
La belleza del tercer varón de Ángel no pasa tampoco inadvertida y, aunque ha tenido algunas ofertas para dedicarse el modelaje, por el momento prefiere centrarse en sus estudios. "Me lo han dicho muchas veces, pero mis padres siempre me han recomendado, primero, tenis y estudios, y luego, modelo. Igual lo puedo combinar, ¡por probar no estaría mal!", no descarta pisar una pasarela en el futuro, aunque tiene claro cuál es su mayor sueño en lo laboral en este ámbito: "Me gustaría tener mi propia empresa, quizá, enfocada en el mundo de la moda".
Sea cual sea el camino que finalmente escoja, Hugo tendrá muy presente los valores que su progenitor le quiso transmitir en vida. “Me han enseñado que lo importante no es lo material, sino la huella que dejas en la gente (…) Él todo hacía al cien por cien. A veces parecía que no era humano. ¡Nunca lo he visto triste ni quejarse por nada! Me han inculcado esa pasión por la vida”, le dio Angel Nieto grandes lecciones a Hugo, que no olvidará nunca “la suerte que he tenido al tenerlo como padre”.