Han pasado algo más de dos meses desde que la revista Semana descubriera en sus páginas el romance entre Sara Carbonero y Kiki Morente. Vicky Marcos, una íntima amiga de la periodista y la pareja del percusionista de la banda del músico, habría sido la persona que ejerció de celestina entre ambas personalidades. Días después de que esta exclusiva provocara una auténtica marea mediática, el hermano de Estrella Morente concedía sus primeras declaraciones y aclaraba que se estaban “dejando llevar”. Y esta especie de confirmación intensificó el deseo de los paparazzi de tomar la primera imagen de ellos juntos.
Si a principios de este mismo mes era ¡Hola! la afortunada publicación que ofrecía las primeras instantáneas de los tortolitos en el descanso de uno de los conciertos del granadino, ahora ha sido la misma cabecera que destapó su idilio los encargados de desmentir los continuos rumores de ruptura, llevando a portada “las imágenes más buscadas de la pareja del momento”. En esta edición, Sara, agarrada del brazo de su chico, pasea por las calles de la capital tras disfrutar de una íntima y romántica velada en un restaurante de la capital al que acudía cuando estaba casada con Iker Casillas, según ha señalado este medio.
Sara y Kiki habrían permanecido en el interior de este establecimiento, ubicado en el barrio de los Austrias, durante más de tres horas, abandonándolo cuando los encargados tuvieron que echar el cierre para cumplir con las restricciones. Ya en la calle, con una actitud muy cómplice, continuaron charlando sin percatarse de la presencia de los fotógrafos, que inmortalizaron el fin de esta cita. A pesar de que Kiki tiene que viajar mucho por su trabajo, ahora intentaría pasar la mayor parte de su tiempo en su domicilio de Madrid para estar más cerca de la presentadora, prueba de que esta discreta historia de amor está cada día más consolidada.
Hace tan solo unos días, Sara tuvo el primer encuentro con los medios desde que saliera a la luz su relación con el músico, esquivando todas las preguntas referidas a su vida sentimental. “No voy a entrar a aclarar absolutamente nada”, advertía a sus compañeros de profesión. “Estoy muy bien, pero es que hay tantas cosas en las que no voy a entrar porque sería una locura y no hay tiempo. Me habéis dado un verano…”, se lamentaba de la presión mediática a la que han estado sometidos. “Estoy ilusionada con todo, con la vida, que es muy bonita. Estoy muy feliz, está todo muy bien. Hay tiempo para todo, incluso para el amor, pero lo importante es la salud”, puntualizaba.