Para Tamara Falcó este año ha supuesto un no parar de noticias sobre su vida personal y profesional. Tras romper su relación y su compromiso con Íñigo Onieva tan solo 48 horas después de anunciarlo a los cuatro vientos, la marquesa de Griñón podría haber encontrado ahora en un joven de su círculo de amigos una nueva ilusión.
Tras las palabras de Tamara Falcó para 'Diez Minutos' en las que confirmaba que "algo hay, pero porque hemos salido 2 o 3 veces", las reacciones no se han hecho esperar. Ahora que definitivamente ha decido cerrar esa etapa de su vida y dar 'portazo' al que un día pudo llegar a ser su marido, son muchos los que se alegran por verla de nuevo feliz. Sin embargo, la reacción más sorprendente de todas ha sido la de Esther Doña, viuda de Carlos Falcó.
La que una vez fue madrastra de Tamara se ha pronunciado acerca de esta posible nueva relación de la joven: "Me recuerda a la historia mía con Santiago porque éramos amigos y yo pensaba que eso era positivo porque adelantas en la relación". La modelo comparaba así la nueva ilusión de Tamara con su ya acabada relación con el juez Pedraz, que también terminó poco tiempo después de haber anunciado que pasarían por el altar.
Ante tan llamativas similitudes, Doña ha querido aconsejar a la que un día fue parte de su familia. "Yo no lo recomiendo", insistía refiriéndose a la posible relación de la hija de Isabel Preysler con su amigo (y también de Onieva) Hugo Arévalo. "Los amigos, amigos" declaraba. No obstante, a pesar de no ser partidaria de este tipo de noviazgos, la empresaria ha querido desearle lo mejor a Tamara con un "lo importante es que ella esté feliz e ilusionada".
Ahora que Esther Doña ha querido aconsejar a la empresaria en su nueva relación amorosa, si Tamara aceptase las advertencias de la colaboradora hay quien cree que podría sucederse de nuevo un acercamiento entre la antigua marquesa de Griñón y la hermana de Enrique Iglesias. Durante un tiempo, cuando la modelo ostentó el puesto de marquesa de Griñón por su matrimonio con Carlos Falcó, ambas dejaron entrever que la relación no era muy estrecha ni con ella ni con el resto de hijos del aristócrata. Sin embargo, el dolor por la pérdida de su padre hizo que los Falcó arrimasen posturas con la que fue su mujer e incluso llegasen a preocuparse por su estado de salud en el duelo.