El próximo 13 de abril se cumplirán cinco años de la última emisión del programa Cámbiame. El espacio de Telecinco, que amenizaba las últimas horas de la mañana, cambiaba la imagen de famosos y personas anónimas, asesorados por tres conocidos estilistas que saltaron a la fama: Pelayo Díaz, Natalia Ferviú y Cristina Rodríguez. Sin embargo, fueron las habituales discusiones entre estos expertos lo que más dio que hablar en las últimas semanas de grabación. Unas rencillas que no parecen haber sido resueltas después de todo este tiempo.
Cristina Rodríguez, en una reciente entrevista con ‘Socialité’, explicaba que aún mantiene el contacto con Marta Torné –primera conductora del formato-, Natalia Ferviú y Juan Avellaneda, pero que no había vuelto a saber nada de Pelayo. “No tengo ninguna relación. Nunca más nos hemos vuelto a ver”, comentaba la jueza de ‘Mediaset Night Fever’, que no sabe si se acercaría a saludar al estilista en el caso de coincidir en algún lugar: “No lo sé”.
"Hay gente con la que tienes encuentros y gente con la que tienes desencuentros. No tengo ni idea de si es el presidente de los Estados Unidos o si le han hecho diseñador de Gucci. Es que no tengo ni idea", era bastante tajante la siete veces nominada a los Premios Goya a Mejor vestuario, que no ha dicho “ninguna mentira”, según el propio Pelayo, que ha respondido a sus declaraciones en una conexión telefónica con ‘Sálvame’.
Pelayo no niega que la relación entre los miembros del equipo de coaches del que formaba parte estalló por los aires por sus constantes encontronazos. "Yo guardo muy buen recuerdo de los años que estuvimos en ‘Cámbiame’ al final, pues no nos entendimos y no todo el mundo tiene luego que llevarse toda la vida bien”, no guarda rencor a Cristina, a quien considera “una gran profesional”.
“Me quedo con el tiempo que trabajamos juntos”, asegura que él sí que se acercaría a hablar con ella si se cruzan en un futuro. “Creo que sí la saludaría si la encontrara y entiendo que haya gente le hace más mella una discusión o es más difícil olvidar lo que ha pasado. Al final de ‘Cámbiame’, las cosas estaban muy tensas en general. Hubo malestar, hubo unas discusiones y ya está. Hubo cosas que no me gustaron, pero como te decía, al final, cuando echa la vista atrás soy una persona que prefiere quedarse con lo bueno”, entiende la postura contraria.
Lo que sí ha querido puntualizar Pelayo es que él intento tender puentes en el pasado sin suerte. “Yo después de lo que pasó sí que le escribí en alguna ocasión no obtuve respuesta y no me lo tomé a mal porque entiendo que, pues que la gente tiene sus tiempos. Yo por lo menos no quiero tener como esa espinita clavada. A mí no me gusta vivir enfadado con nadie. Por mi parte no hay ningún problema”, estaría “encantado de hablar con ella” para lavar los trapos sucios de una vez por todas.