La última vez que Nacho Palau pisó un plató de televisión aún no sabía que tenía cáncer. Acababa de participar en 'Supervivientes', reality en el que quedó finalista y que supuso una bomba de oxígeno tanto económica como vital que le auguraba un ilusionante futuro. Sin embargo, la enfermedad llegó para cambiarlo todo, y esos planes que tenía en mente se esfumaron de un día para otro. Ahora, nueve meses después de aquello, el escultor valenciano ha reaparecido en 'Déjate querer' para narrar esta intensa experiencia de la que espera salir recuperado para poder "estar fuerte de nuevo y vivir".
Aunque su actitud sea optimista y esperanzadora, Palau no siempre pudo pensar en el mañana. Así se lo ha confesado a Paz Padilla en esta honesta conversación en la que, además de detallar las duras consecuencias físicas y emocionales que surgieron a raíz del tratamiento (entre ellas perder la voz, algo que le hizo empatizar con Miguel Bosé), ha asegurado que estuvo a punto de tirar la toalla.
El nivel de desgaste fue tal, ha contado en la entrevista, que un día en concreto quiso desaparecer. Cuando todo parecía evolucionar favorablemente, una recaída "tremenda" le hizo pensar que no quería continuar luchando. Y fueron Ivo, Telmo, Tadeo y Diego, los cuatro niños que nacieron durante su relación con su ex, quienes le animaron a tirar para adelante. "No soporto verme vulnerable, lo paso muy mal viendo las caras de la gente. Por eso estoy tan entregado a mi casa y a mis nanos", ha manifestado.
Como lección vital, Nacho Palau ha aprendido que la vida te cambia en cualquier momento. "Es algo que sabemos pero que no nos creemos hasta que te pasa", ha afirmado. "Sé que, en caso de que me fuera, ellos iban a estar muy bien cuidados, pero quiero que mis hijos tengan a su padre. Les puedo enseñar muchas cosas que les pueden ayudar a ser tíos fuertes, seguros. Si me tengo que ir, me voy, pero creo que lo estoy haciendo muy bien con los cuatro", ha defendido.
Tener a los cuatro, no solo a Ivo y Telmo, que viven con él, sino también a Diego y Tadeo, los hijos biológicos de Bosé, ha sido gracias al acercamiento que han tenido Nacho y Miguel después de olvidar su turbulenta separación. Aunque el artista ya afirmó esta semana en ARCOMadrid que su vínculo siempre había existido, escuchar de boca del exsuperviviente, como en el siguiente vídeo, cómo fue esa conversación en el que le comunicó que le habían detectado un cáncer hace que entendamos en qué punto se encuentran ahora: