Valeria Duque ha roto su silencio. La modelo colombiana, a quien se le atribuye haber sido el detonante de la separación entre Rosalía y Rauw Alejandro tras tres años juntos, ha dado su versión de los hechos en una entrevista para la revista ¡Hola! “He decidido hablar para defender mi honor y poner fin a los rumores y especulaciones que han surgido sobre mi supuesta implicación en la ruptura”, argumenta durante esta conversación que aborda esta situación para salvaguardar tanto su bienestar como el de su familia.
La influencer, que emitió un comunicado en sus redes sociales donde desmentía de forma tajante haber tenido un affaire con el intérprete de ‘Todo de ti’, reitera que no ha tenido ningún tipo de relación con el cantante: “Es importante aclarar que mi primera vez viendo a Rauw Alejandro no fue en una fiesta, sino en su concierto en la Ciudad de México. No fue la primera vez que lo conocí, sino más bien la única ocasión en la que coincidimos. Fue en mayo, durante su concierto en la Ciudad de México”.
Este único encuentro “fue breve”, según Valeria, “no duró más de 5 minutos y ocurrió de manera casual, como una fan más en medio de la multitud”. Sostiene que en ese espectáculo estuvo en el backstage debido a las demandas de su profesión: “No me acerqué personalmente a Rauw Alejandro ni tuve un contacto cercano con él, ya que mi presencia allí se limitaba a cumplir mis deberes profesionales. Asistir a eventos de la industria musical es parte de mi trabajo como modelo”.
En este escenario, Duque reconoce que no se ha puesto en contacto con el músico ni con ningún integrante de su equipo después de que la vincularan con la ruptura. “No, no he escrito al mánager de Rauw Alejandro para que lea ningún comunicado en mi nombre. Cualquier declaración que haya hecho o que esté por hacer la haré de forma independiente y personal”, optó "por mantenerme al margen y no buscar ningún tipo de comunicación directa con él" después de que surgieran las conjeturas en las redes sociales.
"Lamentablemente, en el mundo digital los rumores y la desinformación pueden propagarse rápidamente, especialmente a través de las redes sociales. En este caso, todo comenzó con un hilo en Twitter y, a veces, la información puede ser compartida sin ser verificada previamente, lo que puede dar lugar a malentendidos y situaciones como la que estoy viviendo", señala, asegurando que se ha quedado en shock al descubrir "cuánto resentimiento existe en el mundo y cómo las redes sociales se han convertido en un espacio para que algunos desadaptados desahoguen sus emociones negativas".