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Ana Obregón ha sido una de las grandes protagonistas de la última gala de los premios ELLE Cancer Ball. La actriz llegaba radiante a la alfombra roja y, entre flashes, desvelaba uno de sus planes más esperados en los próximos meses. Siempre dispuesta a ayudar en la investigación contra el cáncer, la expareja de Alessandro Lequio, reaparecía en un evento luciendo un vestido de Ruben Hernández, -un diseñador por el ha apostado en varias ocasiones-, en tono rosa chiche con falda plisada y escote en corazón y cubierto por una tela transparente que terminaba en el hombro.
La actriz, en el photocall, irradiaba felicidad y es que, su año, ha estado lleno de momentos inolvidables como la publicación de 'El chico de las musarañas', unas memorias que comenzó su hijo Aless -que fallecía en mayo del 2020 tras una larga lucha contra el cáncer- y la llegada al mundo por gestación subrogada de Ana Sandra, su nieta.
Con paso firme y sin tener en cuenta las opiniones del resto, Ana tomó su primera decisión: pasar los primeros días de Ana Sandra en Miami, donde organizó su vuelta a España. Una vez en el país, la actriz concedía varias entrevistas en las cuales no podía disimular su felicidad y su nueva vida en rosa tras la llegada de su nieta.
Con la llegada al mundo de la hija de Aless Lequio, comenzaron numerosas dudas y cuestiones que la propia Ana ha respondido en primera persona. Siguiendo la tradición familiar, y como hizo también hace casi treinta años con su hijo, la actriz desvelaba que uno de sus primeros planes en España era bautizar a Ana Sandra. De hecho, su intención era bautizarla con el mismo faldón que llevó su padre. Un faldón que ha causado una gran polémica llena de incógnitas.
Mientras que la actriz aseguraba que aún no lo tenía, porque se tenía que poner en contacto con el padre de su hijo, el conde Lequio aseguró que él no tenía bajo su poder ese faldón que lució su hijo, pues no es el que pertenecía a su familia -y que también lucieron algunos miembros del linaje Borbón-, si no que su hijo llevó uno que pertenecía a la familia Obregón.
Es por ello que Ana, clara y concisa, ha querido desvelar que están con las últimas pruebas del vestido. Un vestido que su nieta lucirá en los próximos meses. Concretamente a finales de año, en diciembre, cuando tendrá lugar este día tan esperado para la familia. Además, la propia actriz ha desvelado quién será el padrino de su nieta: Justin, un íntimo amigo de su hijo que volará de Estados Unidos a España para este día tan importante. Un día que, sin duda, estará cargado de emotividad y lleno de gestos y homenajes al padre de la pequeña, Aless Lequio.