El público suele imaginar a las estrellas de cine y televisión disfrutando de un ritmo de vida lujoso, entre suites de hoteles, exclusivas urbanizaciones y un sinfín de eventos selectos. A ello ha contribuido el imaginario colectivo durante décadas, algo que han venido a reforzar las redes sociales, donde los vips presumen, por norma general, de su privilegiado día a día. Pero, pese a la brutal exposición a la que gran parte de las celebrities se ven expuestas, queda margen todavía para la sorpresa: el actor Miguel Ángel Silvestre ha revelado recientemente que lleva una vida distinta a la esperada: vive en mitad de la naturaleza y con escasos servicios.
Comenzó en el mundo del tenis para virar posteriormente hacia el del modelaje, llegando a convertirse en Mister Castellón. A principios de la década de los 2000 hizo sus primeros pinitos en esto de la interpretación: sus participaciones en series como 'Motivos personales' y, muy especialmente, 'Sin tetas no hay paraíso', catapultaron su éxito y lo convirtieron en uno de los actores más demandados. Desde entonces, Silvestre ha pasado de ser una estrella nacional a un nombre reconocido en el audiovisual internacional gracias a sus papeles en proyectos de éxito global, como 'Sense8', 'Narcos', 'La casa de papel' o 'Sky Rojo'.
Los seguidores de Miguel Ángel son testigos de cuál es el ritmo de vida del castellonense, que suele dar buena cuenta de ese círculo de rodajes, viajes, estrenos y estancias en hoteles espléndidos y destinos únicos. Pero parece que el día a día del intérprete es bien distinto una vez se aleja de los focos. De ello ha hablado en una entrevista para el diario El Mundo. En ella, Silvestre ha revelado al periodista Iñako Díaz-Guerra circunstancias desconocidas sobre su vida personal: vive en mitad de un bosque y, en sus propias palabras, con servicios "muy mínimos".
El actor ha profundizado en cuál es su realidad doméstica, sobre la que no se tenía constancia hasta ahora. Miguel Ángel vive, en buena medida, de lo que cultiva en su propia casa. "Hago autoabastecimiento de muchas cosas", ha confesado al periodista. Según él, la naturaleza tiene una fuerza mucho mayor que la vida en la ciudad y el ritmo de vida considerado estándar. "La naturaleza es mucho más brusca, un jabalí es mucho más brusco que todo eso", ha resumido.
Quien diera vida al mítico Duque en la serie coprotagonizada por él y Amaia Salamanca, que se reencontraban hace unos meses, reconoce que este estilo de vida no tiene nada que ver con pretender nada místico, sino que es parte de su identidad. "Simplemente es quien soy. Yo soy un hortelano valenciano, siempre lo he sido y siempre lo seré", ha explicado, reconociendo que es el hábitat en el que mejor se desenvuelve.