Nadie se puede creer todavía que haya pasado de verdad. El actor Matthew Perry, que dio vida al irónico Chandler Bing en la serie 'Friends' durante diez exitosas temporadas, ha muerto a los 54 años de edad. Su cuerpo fue hallado en el jacuzzi de su domicilio en Los Ángeles, aunque la policía no ha determinado las causas exactas de la muerte. Lo único que se sabe es que no había signos de violencia en la escena del fallecimiento y se especula que podría haber sido un ahogamiento por un paro cardíaco.
El mundo entero llora la muerte de este entrañable actor, que se ganó el corazón de la audiencia a base de su inolvidable humor negro. Sus compañeros de reparto se han quedado en shock al conocer la trágica noticia y hoy cobra más sentido, si cabe, la escena final de Friends, en la que Matthew pidió decir la última palabra. Con el piso de Mónica ya vacío, todos los actores se funden en un abrazo que, ahora, es el doble de importante.
Después de diez años soltando chascarrillos, era de esperar que fuera Chandler el que hiciera la última y definitiva broma. El propio Matthew pidió ser el último que se pronunciara, antes de cerrar para siempre la puerta morada de Mónica. Y así fue: cuando todos los amigos se disponen a salir del piso y proponen ir a tomar un café. "¿Dónde?" dice Chandler, como si no llevaran cien años yendo al Central Perk. La carcajada que le robó a las lágrimas inevitables del último segundo de rodaje reflejan perfectamente la personalidad de actor y personaje.
A lo largo de las temporadas, los problemas de Perry con el alcohol y las drogas se hicieron físicamente evidentes. El aumento de peso era un reflejo de sus malas épocas, que le llevaron al límite cuando le estalló el colon y se quedó dos semanas en coma. En su libro de memorias, casi como un mal augurio, el actor confesó que él "ya debería estar muerto".