Hace nueve meses que, en sus propias palabras, Ana Obregón volvió "a vivir". El nacimiento de su nieta Ana Sandra, la hija genética de Aless Lequio ha dado un giro de ciento ochenta grados en la trayectoria vital de la actriz y presentadora, que atravesó momentos muy complicados tras el fallecimiento de su hijo en el verano de 2020. En marzo de 2023 fue cuando, en secreto, el proceso de gestación subrogada por el que llegó la niña, dio a término. Dio comienzo entonces un terremoto mediático que ha compaginado con los cuidados de la bebé. Ana no ha estado sola en todo este tiempo, sino que ha contado con la ayuda de una cuidadora.
La exposición mediática sobre la nueva faceta de Ana como abuela ha sido total. Muy especialmente, durante su estancia en Miami, lugar donde se produjo el parto y en el que Obregón estuvo instalada algunos meses, hasta su regreso a España, con su nieta, a finales de mayo. La prensa siguió a la bióloga desde el minuto uno, cuando comenzó a explicar que la llegada de su nieta se producía como cumplimiento de la promesa hecha a su hijo, o cuando reveló que, por fin, tras casi tres años abandonaría el luto.
Durante su etapa en Florida, Ana contó con ayuda profesional. Desde aquellas primeras imágenes de la actriz paseando a la bebé por las calles de Miami la vimos en compañía de una mujer que, como se supo por aquel entonces, había contratado para que le echase una mano en esos primeros días en los que tuvo que hacer frente a los cuidados de un bebé a los 68 años. Sin que trascendieran más detalles con respecto a su identidad, su cometido o las condiciones en las que trabajaba para nieta y abuela, se supo que Ana la había buscado una vez llegó a Miami (para evitar filtraciones si viajaba con ella desde España) la sorpresa saltó tras el viaje a España.
Porque esta mujer ha seguido acompañando a la presentadora y a la pequeña en todos estos meses, desde que ambas se instalasen definitivamente en nuestro país. De hecho, este pasado domingo, con la celebración del esperado bautizo de la niña, la prensa la captó también en varias imágenes durante la llegada a la iglesia de Nuestra Señora de La Moraleja, donde se reunieron familia y amigos íntimos de Obregón.
El diario El Español pudo recabar más datos respecto de su figura hace unos meses. Se confirmó entonces que la mujer había viajado con Ana a España porque, efectivamente, seguía estando contratada. El citado medio supo también que trabaja codo con codo con la actriz, cuenta con un contrato "indefinido" y que realiza actualmente la misma labor que empezó a desempeñar en Miami. Ana se habría quedado "muy satisfecha" con ella, y le "mejoró las condiciones" con el tiempo, tras haber entablado con ella una "bonita" relación.