Días después de conseguir la libertad condicional, Iñaki Urdangarin ha concedido una entrevista a Juanma Castaño en 'El Partidazo de la Cope'. El exjugador de balonmano ha explicado que actuamente las condiciones que tiene son de informar de sus movimientos y obrar correctamente. "Hago una vida normal, no me escondo. Tampoco soy una persona de esconderme mucho, siempre tengo mis mismas rutinas", ha asegurado.
El que fue marido de la infanta Cristina - ya que ambos anunciaron con un comunicado "la interrupción" de su matrimonio -, se ha mostrado bastante molesto al ser preguntado por su etapa en prisión. "Prefiero que eso quede atrás, no me gustaría en un programa deportivo destapar un asunto pasado personal", decía. Iñaki Urdangarin ha insistido en la idea de "mirar hacia delante" y cerrar esa etapa de prisión con la libertad condicional que acaba de obtener.
"Es duro, evidentemente que es muy duro, por las condiciones en las que entré y por las circunstancias que viví en soledad. Leí 168 libros y el deporte es el que me mantuvo bien, la práctica diaria me permitía tener una buena rutina de vida", ha recordado sobre los años que estuvo dentro. Ahora, Iñaki asegura que tiene "una vida normal", no ha tenido problemas psicológicos y tiene "gran ilusión" por reiventarse.
Urdangarin, que considera que ha pagado "un precio importante" las cosas que le han ocurrido, espera tener oportunidades laborales y acaba de poner fin a su trabajo en el despacho de abogados en el que conoció a Ainhoa Armentia, su actual pareja. El exjugador de balonmano quiere volver "al mundo del deporte" y está haciendo prácticas en el club del Barcelona.
El que fue yerno del rey admite que le gusta estar informado "de las cosas que tienen un propósito" e intenta evitar lo que no le interesa. "Habrá que saber, en general, lo que dicen de mí. Si veo que es cierto o si veo que no lo es. Pero no le doy importancia a lo que opinen los demás", reconoce.
En el último mes, el nombre de Iñaki Urdangarin ha copado los titulares después de salir a la luz unas imágenes de la mano con Ainhoa Armentia antes del comunicado de "interrupción" de su matrimonio. Su hijo Pablo, jugador de balonmano en Barcelona, ha sido muy preguntado por los paparazzis y ha sorprendido por la calma que ha demostrado tener ante la prensa. "Mi hijo Pablo no podría hablar en la calle como lo hace si no tuviese información verdadera como tenemos en casa", dice su padre.
Urdangarin está "muy orgulloso" de lo que su hijo Pablo está haciendo. "Su etapa de formación no ha sido fácil, hemos vivido en países en los que no había mucho balonmano, ha tenido que trabajar muy duro para recuperar la táctica. Yo me encuentro muy orgulloso de lo que está consiguiendo, independientemente de dónde vaya a llegar", explica.
Iñaki dice que los padres presumen de sus cuatro hijos, pero da la razón a todos los que opinan que Pablo es "educado y tiene un carácter tranquilo". "Yo creo que su carácter le ayuda a afrontar situaciones de estrés de forma cómoda, incluso en los partidos. Cuando él tiene las ideas claras no tiene otra opción que demostrarlo. Nos ha demostrado que puede hacerlo bien, muy contento por ello. Ningún padre ni ninguna madre de nuestro país queremos que nuestros hijos pasen un mal momento", dice sobre el acoso de los paparazzis.