Son muchas las famosas que se están apuntando a un movimiento que ya triunfa en las redes sociales: el llamado efecto ‘cara lavada’. Este consiste en aparecer en cualquier evento público, o incluso en su perfil de Instagram, sin gota de maquillaje. En el caso de las redes sociales, la mejor opción será dejar de lado los efectos, los filtros y, sobre todo, la utilización de cualquier tipo de retoque. Así, se busca visibilizar que no todos los cuerpos son iguales, que las ‘imperfecciones’ son bonitas y que no tenemos que tener ningún complejo con nuestro aspecto físico.
Así, han sido muchas las celebrities que se han sumado a esta ola. Este es el caso de la cantante Becky G. Lo cierto es que si echamos un vistazo a la Becky G del pasado, nos podemos dar cuenta que le gusta maquillarse, jugar con las sombras y lucir unas alargadas pestañas. Pero, ahora, parece ser que todo eso ha cambiado.
Fue en 2020 cuando decidió dar este paso y se mostró al mundo sin ningún tipo de maquillaje. Así lo hizo a través de su perfil de Instagram, donde acumula millones de seguidores, y donde todos ellos pudieron ver a la cantante ‘a cara lavada’. Aunque eso sí, en esta ocasión no fue para defender que todos los rostros son bonitos, sino por temas publicitarios.
Ahora, parece ser que sí se lo ha tomado más en serio. Hace unos meses decidió hacer pública una imagen en la que se podía ver a Becky con una enorme sonrisa. Aunque eso sí, lo que más llamaba la atención es que se había desecho de todos sus complementos y lucía una cara totalmente lavada y ningún tipo de filtro. Así, el selfie fue aplaudido por todos sus seguidores, quienes resaltaron lo guapísima que estaba la artista.
Fue ella misma la que comentó en la imagen ‘Sin maquillaje y sin filtro’, a lo que sus seguidores respondieron: “Estás radiante” y otros comentarios donde se apoyaba esta iniciativa: “Todo al natural”.
Parece ser que Becky sigue la estela de otras famosas que ya han apostado por la naturalidad. Es el caso de Alicia Keys, quien acude a todas las alfombras rojas sin ningún tipo de maquillaje y sin moldear su pelo, reivindicando, así, sus raíces.