Hay tendencias que nacen, crecen, se reproducen, mueren y resucitan. Generalmente lo hacen de una manera nueva y distinta y eso es exactamente lo que ha ocurrido con el caracolillo en la frente, eso tan español que Estrellita Castro o Miguel de Molina convirtieron en su seña de identidad y que está viviendo una segunda edad de oro. Lo hemos visto en alfombras rojas, en algunas galas y en una invitada de lujo en el desfile de Dior y está resultando ser el guiño más divertido y moderno que se puede hacer a una de las imágenes más emblemáticas del folclore español.
Muchos pueden ver en el caracolillo una versión simplificada de los ‘baby hair’ que las mujeres de pelo afro llevan años puliendo con formas onduladas sobre su frente y en las patillas, pero su esencia viene de la España más coplera y aunque llevaban años olvidados e incluso denostados hasta en la Feria, de pronto no sólo se aceptan, sino que mujeres como Rosalía, Rihanna o Vicky Luengo los han popularizado a tal nivel que los queremos y necesitamos tutoriales que nos digan cómo se hacen.
Rosalía llegaba al desfile de Dior con un look totalmente negro compuesto por un jersey de cuello alto, una falda larga con abertura lateral y cordón ajustable en la cintura, un plumífero corto, botas moteras de media caña, el bolso Lady Dior y unas gafas futuristas que los fotógrafos le pidieron que se quitara. Espontánea, la ‘motomami’ respondió: "No, no, no, el look es con las gafas".
Más allá de la respuesta de la catalana, que no tardó en hacerse viral, fue el peinado creado por el estilista Jesús Guerrero el que acaparó todos los titulares: el pelo con raya en medio recogido en dos trenzas y un caracolillo sobre la frente.
No es la primera vez que Rosalía apuesta por el mechón en forma de caracol sobre la frente, ya lo hizo en los Grammy Latinos de 2019, donde los lució con un vestido de lunares de Carolina Herrera, y de manera más sutil en la última edición de estos premios, peinada también por Jesús Guerrero y vestida con un modelo semitransparente de Balenciaga.
Sevilla, que este año fue la elegida para celebrar la gala de los Grammy, parece que fue una inspiración para muchas otras artistas, porque Rosalía no fue la única que con su look hizo un homenaje a la estética más puramente andaluza. Otras invitadas como Mon Laferte y Danna Paola, peinada por su estilista Omar Álvarez, también versionaron el caracol en la frente. La primera con melena suelta, flores rojas y unas finísimas cejas propias de los años 40. La segunda, con una coleta alta y pulida con lazada de estilo ‘coquette’.
Quien también ha caído rendida a la tendencia es Rihanna, que recientemente ha protagonizado junto a su pareja, Asap Rocky, el video “Born to Steal: Yours, Mine, Ours” (Nacida para robar: tuyo, mío, nuestro) creado para promocionar su último lanzamiento de Fenty Beauty, el bálsamo labial ‘Lux Balm Ultra-Hydrating Cherry Lip Balm’. El look elegido por la de Barbados para ejercer de ‘femme fatal’ es un vestido negro de escote halter con abrigo de pieles y pelo con ondas al agua y caracoles en la frente.
A finales del mes de febrero Vicky Luengo paseaba por la alfombra roja en el estreno de “Reina Roja”, la serie en la que la actriz da vida a Antonia Scott. A pesar del perfecto vestido negro de Dior, el maquillaje y el look capilar creados por María Verano fueron los que acapararon todo el protagonismo.
El primero por centrar la atención en los labios rojos sobre una piel luminosa y sin imperfecciones y el segundo, por el recurso del caracol en la frente que empieza a ser el imprescindible invitado de todos los saraos.
Contaba Estrellita Castro que con solo 3 años quiso que su madre la peinara con unos caracolillos para ir a la feria. Se los fijó a la frente con jabón y la acompañaron hasta el día de su muerte.
Y muchos años después no hay demasiados cambios a la hora de recrear este peinado, que se puede llevar con melena o con el cabello recogido. Basta con separar un mechón, aplicar algún tipo de fijador y darle forma sobre la frente bien con las manos, con un cepillo de cejas o con un peine de mango largo.