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Los cortes de pelo pixie son una de las tendencias más sofisticadas, glamurosas y arriesgadas de 2024. Casi todas las mujeres que deciden cortarse el pelo lo hacen porque buscan cambios más profundos, ya sea a nivel personal, ya a nivel puramente estético y es que a un nuevo look capilar le suelen suceder cambios en la ropa y el maquillaje y a veces otros mucho más importantes. Pero lo cierto es que las mujeres no han contado nunca que el corte de pelo no es más que una consecuencia de un cambio que ya se ha producido, como le ocurrió a Cara Delevingne cuando se pasó al pixie.
Más allá de si es motivo o consecuencia, un corte de pelo tan radical no es una decisión fácil de tomar, aunque la historia, en particular la historia del cine y de la moda, está llena de mujeres a las que un corte de pelo les cambió la vida. Nieves Álvarez se convirtió en La Top Model española cuando pasó de tener melena a un corte pixie en toda regla. Otro que se convirtió en un auténtico éxito fue el que Vidal Sassoon hizo a Mia Farrow en la película “La semilla del diablo”, un gesto que los convirtió en leyenda a él, a ella y a la película. Anne Hathaway se llevó un Oscar tras un corte de pelo por exigencias del guion de “Los Miserables” y podríamos nombrar muchos más ejemplos tanto en el cine, como el de Úrsula Corberó o Michelle Williams, como en la moda con Linda Evangelista o Karlie Kloss.
La primera vez que te haces un corte pixie se puede comparar con la primera vez que te tiras en paracaídas. Durante el proceso hay la misma adrenalina, no sabes si la cosa va a acabar bien y rezas todo lo que sabes para no terminar estrellada (y con una gorra durante un año), pero si tu estilista da con el ‘pixie’ que más te favorece, es posible que tardes mucho tiempo en volver a dejártelo largo porque entre sus muchas virtudes reúne una que resulta esencial: la comodidad.
Cuando hablamos de corte pixie lo hacemos como si fuera un corte de pelo único, pero realmente hay diferentes opciones que favorecen a distintas formas de rostro y tipo de pelo y estos son los que se han convertido en tendencia en 2024.
El ‘pixie’ clásico es el que no pasa de moda, se trata de un corte a lo chico en el que la zona del cuello y los laterales se mantiene corta, dejando el cabello algo más largo y con mayor volumen en parte alta de la cabeza. Es el corte perfecto para equilibrar un rostro triangular o alargado. Esta base común puede tener variaciones que van desde un flequillo extralargo hasta el denominado ‘mixie’.
El corte ‘pixie’ con flequillo largo es una apuesta atrevida, aunque no es de las más arriesgadas porque permite cambiar de estilo jugando con la manera de peinar el flequillo: hacia un lado, hacia adelante o hacia atrás, e incluso experimentar con efectos como el ‘wet’ o el ‘glow’. Es el corte ideal para un rostro en forma de corazón.
Corte ‘pixie’ con flequillo y patillas largas
Si además del flequillo se unen al ‘pixie’ unas patillas largas, estás ante uno de los cortes más sofisticados, favorecedores y fáciles de controlar. Del mismo modo que el anterior, permite muchas opciones de peinado y resulta perfecto para mujeres con el rostro cuadrado o redondo, porque ayuda a afilar su silueta.
Si lo que buscas es añadir volumen tanto en la parte suprior como en la coronilla, prueba con un ‘pixie’ cortado a capas. Esta opción es perfecta para equilibrar un rostro alargado, aunque puede ayudar a afilar un rostro cuadrado si además dejas algo más larga la zona del cuello.
Uno de los ‘pixie’ que triunfa en 2024 es el se trabaja en pelo ondulado. El truco para que resulte favorecedor en este tipo de cabello es saber escalar las medidas porque es necesario dejar el largo suficiente para que al formarse las ondas se cree volumen tanto en la zona alta como en la del flequillo, así como en los laterales y en la parte posterior, aunque el resultado debe ser equilibrado y no perder las señas de identidad del corte ‘pixie’.
Otra de las apuestas de tendencia de 2024 es el corte ‘mixie’, que resulta de unir un corte ‘pixie’ y un ‘mullet’. En este tipo de corte de pelo la nuca y las patillas se dejan más largas que en el ‘pixie tradicional’ y se mantienen las características del ‘pixie’ clásico en la zona alta de la cabeza. Se suele peinar aportando textura a los mechones para conseguir un look desenfadado y de apariencia natural. Es el corte perfecto para el tránsito de largo a corto e incluso una apuesta segura si lo que buscas es el proceso inverso, es decir dejar que te crezca el pelo.