Son muchas las mujeres que luchan a diario por la conciliación familiar. Mantener un alto ritmo de vida, en lo que se refiere al ámbito profesional, provoca en muchas ocasiones no llegar a tiempo a las obligaciones de la vida persona. Y eso produce mucho estrés. Dafne Fernández fue madre por segunda vez el pasado mes de diciembre y, en los últimos días, compaginar su faceta laboral con su vida como madre le ha llevado a ir “como pollo sin cabeza”.
La actriz ha explicado a través de sus redes sociales que Jon, su primer hijo que tiene tres años, no está yendo a la escuela infantil porque se ha puesto malo. A esto hay que sumarle su alto nivel de trabajo y que tienen “otro bebé en casa”, que es la pequeña Álex, que tiene seis meses. “Estoy que no paro”, aseguraba en su cuenta de Instagram. Este alto nivel de vida le ha llevado a sufrir mucho estrés y ya empieza a notar las consecuencias en su cuerpo. “Lo estoy notando en la piel en general, pero en la celulitis en particular”, explicaba.
Dafne Fernández ha querido ponerle remedio porque, “ahora que empieza la operación bikini, me estoy agobiando”. Para ello ha decidido hacer ejercicio tres días a la semana y alimentarse de una forma más saludable. “Necesito que me recomendéis una crema anticelulítica, pero de las que se notan. Os leo”, le pedía a sus seguidores.
Unos meses antes de la llegada de su segunda hija, tal y como puedes ver en este vídeo, la actriz ya hablaba de la maternidad y de cómo le había cambiado convertirse en madre por primera vez:
Dafne asegura que cada vez que Jon, que es el mayor, la llama “mamá”, le da “un pellizquito el corazón”. “Por una parte siento felicidad máxima y por otra, aún no me creo que sea mamá y entonces me lo repito en mis adentros”, explicaba el pasado Día de la Madre. La actriz ha confesado que ser mamá de Jon y de Álex está siendo “el papel más importante” de su vida. Y el pasado mes de abril, la mujer de Mario Chavarría aseguraba que, tal y como le habían adelantado algunas madres, desde que tiene a su segunda hija, el amor “no se divide, se multiplica”. “Lo corroboro. Me va a explotar el corazón”, confesaba.