A pesar de que nos hartamos a decir que el desayuno es la comida más importante del día muchos se la saltan o no es lo suficientemente completo como para tener la energía suficiente durante el día. Tomar un buen desayuno por la mañana a veces no es del todo fácil por eso de tener el estómago algo cerrado a primera hora de la mañana o porque no tienes tiempo. Por eso mismo te mostramos varios desayunos fáciles, muchos de ellos rápidos, ricos en proteínas para que te ofrezcan la energía necesaria para afrontar el día y además consiga saciarte para evitar picar entre horas. ¿Ya has probado alguno?
Es uno de los desayunos más sencillos. Pues un poco de yogur natural desnatado mezclado con algunos frutos secos, como las nueces, que son muy ricas en proteínas, es fantástico para empezar el día con energía. Pero esto es lo más básico, ya que puedes añadirle multitud de alimentos más, como diferentes tipos de fruta troceada, copos de avena o un poco de miel o sirope de agave. Fácil, sencillo y riquísimo para comenzar el día con el estómago lleno y a tope de energía.
Tranquila porque no vas a tener que hacer una tortilla española desde buena mañana. Con un huevo y la clara de otro puedes conseguir una tortilla francesa en un momento que te dará la energía necesaria para comenzar el día. Puedes añadirle pavo o un poco de espinacas para completarla y, si quieres, puedes hacerla tipo revuelto para luego colocarla sobre unas tostadas integrales. Y para completar el desayuno un zumo de naranja natural o un batido de frutas.
Ya que hemos hablado de tostadas nada mejor que un pan integral o de semillas sobre el que colocar unas buenas rodajas de aguacate. Pero el toque viene con el huevo, que puede estar duro y ponerlo en rodajas o hacerlo a la plancha con un poquito de aceite de oliva. Un desayuno fantástico para comenzar el día con vitalidad y que puedes complementar con un buen zumo o batido natural o un café si necesitas despertarte un poco más.
Si hay otro desayuno de lo más básico pero a la vez completo es la leche con algún cereal. Un buen bol con leche, preferiblemente desnatada, o si lo prefieres de soja, avena o cualquier otro tipo, bien mezclada con trozos de fruta y copos de avena a los que puedes también añadir otro tipo de semillas o frutos secos. Un desayuno de lo más sencillo y rápido pero que te permitirá comenzar el día con el estómago lleno y a tope de energía.
De vez en cuando hay que darse un caprichito al paladar y este no tiene que ser perjudicial para nosotros, ya que puede ser de lo más sano y hacerte unas ricas tortitas de plátano. ¿Cómo? Pues de forma muy fácil, así que atenta. Mezcla en una batidora un plátano con una taza de harina de avena, un huevo, una pizca de canela y sirope de agave, stevia o lo que prefieras para dar el toque dulce. Comienza a hacer las tortitas con la masa en una sartén y sírvelas como quieras, con mermelada casera, fruta o incluso yogur.
Las galletas de avena pueden ser una bueno forma de comenzar el día, más aún si las haces caseras un día y así tienes para toda la semana. Una buena receta en la que puedes añadirle algunas frutas, como manzana y plátano para que sean de lo más completas y sanas, además de unas cuantas nueces para que la cantidad de proteínas sea la adecuada. Puedes tomarlas con un zumo o batido natural o si lo prefieres solo con leche o yogur o tu café de la mañana.