El eyeliner es el mejor aliado de cualquier persona que le gusta sacarse el máximo partido posible. También es irresistible para la mayoría de nuestras famosas, que caen rendidas ante la posibilidad de darle a su make up un giro de 180 grados. Es por eso que celebrities como Úrsula Corberó, Rosalía o Chiara Ferragni -y hasta la política Andrea Levy- siempre se apuntan a las nuevas tendencias en cuanto al delineado que, ahora, tienen su protagonismo en los tonos terracota.
Así, el color vino tinto se ha convertido en uno de los preferidos para conseguir ese eyeliner perfecto. Lo cierto es que ya vimos que las sombras de estas tonalidades eran totalmente un acierto, pero ahora pasan a ser un ‘must’ en el pincel delineador. Este tipo de color lo que hará será darle más profundidad a la mirada y alargar la forma de los ojos.
Se trata de un estilo que puede variar mucho, dependiendo de los gustos de la persona. Y así lo podemos ver entre nuestras famosas. Mientras que Úrsula se decanta por un delineado más grueso, Rosalía lo hace con uno más minimalista. Sí que es cierto que conseguirlo no siempre será fácil, ya que habrá que tener mucho pulso y, sobre todo, saber exactamente la longitud del rabillo, para que nos favorezca lo máximo posible.
En el caso de que no tengas en casa un delineador de este color no habrá de qué preocuparse. Así, este se podrá realizar utilizando un perfilador de labios de larga duración. Eso sí, tendrá que ser lo más fino posible para que el resultado sea de lo más favorecedor y sencillo.
Una vez que tenemos localizado nuestro pincel habrá que ponerse con la creación de este rabillo en el párpado del ojo. Así, lo primero que habrá que hacer será trazar una línea en diagonal desde la línea de agua de las pestañas hacia la sien o las cejas. Una vez que se haya trazado esa cola habrá que unirla con el párpado y rellenarlo hasta la mitad de este.
Será muy importante que corrijamos bien la orientación del delineado con la ayuda de un bastoncillo y un poco de agua. También, esto nos servirá para proporcionar un resultado más desdibujado y difuminado. De esta forma, nos olvidaremos de un eyeliner más marcado y limpio, dando paso a una opción más informal.