Marta Pombo se ha iniciado en el mundo del bótox, que consiste en la inyección de una toxina que se usa para diversos tratamientos médicos, pero especialmente es conocida en estética para hacer desaparecer arrugas faciales. A diferencia de otras celebrities que mantienen en secreto sus retoques de belleza, la influencer ha hablado abiertamente de ello en su perfil de Instagram, desvelando el motivo por el que ha decidido dar este paso y contando su experiencia a través de las redes sociales.
“Prevención de riesgos al llegar a los 30. Era algo que me daba mucho miedo por dos cosas. Primero por contarlo y hacerlo público porque pasaba olímpicamente de una polémica, en plan: ‘cómo has podido ponerte bótox, has perdido naturalidad’. No me apetecía meterme en ese momento hater, la verdad, y tenía como esa tensión, en plan, ¿lo cuento o no lo cuento?”, reconocía que no estaba preparada para las críticas. Sin embargo, tras reflexionar, la hermana de María Pombo cambió el chip: “Me dije: ‘Mira, tienes treinta años, chata, eres mayorcita, haces lo que quieres con tu cuerpo y me apetecía contároslo”.
“Esto pasó la semana pasada, pero, con el miedo de contarlo o no contarlo, no lo conté. Y el otro miedo que tenía era el primer contacto con el bótox, ese miedo de cómo quedará”, sentía pánico por el resultado final. “Es verdad que la doctora y su equipo me transmitió muchísima tranquilidad y, sobre todo, vi el resultado en otras personas supernaturales. La doctora estudia los gestos de tu cara y te pone siempre un poco menos de lo que necesitas para que no sea tan agresivo. Entonces este entrecejo pronto va a estar lisito, lisito”, se grababa encantada.
No ha sido la única hermana Pombo que se ha sometido a un retoque estético en este arranque de año. María pasaba por quirófano hace unos días para reducirse el pecho. Pese a que no lo había anunciado previamente, lo cierto es que esta intervención no ha sorprendido a su entorno, ya que la influencer había confesado en más de una ocasión que todos los días de su vida pensaba en esta operación.
Tras llegar a casa después de la intervención, la influencer, al igual que Marta, relataba su experiencia y contaba cómo se encuentra. "Parece que tengo más pecho de con el que me fui, pero me han dicho que es completamente normal que esté inflamado y que de aquí a tres semanas veré la luz al final del tunel y de aquí a seis meses ya veré el resultado definitivo", comentaba frente a cámara la mamá de Martín, que finalmente se animaba y pasaba por quirófano “por comodidad pura y dura”.