"Ha pasado". Dos palabras con las que Laura Escanes ha hecho oficial el que ya es su enésimo cambio de look. Pero no por ello deja de sorprender al millón y medio de personas que la siguen a diario en Instagram. Después de una racha en la que el rubio se ha mantenido en su melena, quizá más de lo acostumbrado, Laura Escanes ha demostrado ser la reina de las transformaciones capilares volviendo al castaño oscuro. Un nuevo aspecto físico que no solo ha revolucionado a sus fans, también a los suyos.
Tras ver la repercusión de su última publicación (150 mil likes y reacciones de amigas y compañeras como Abril Cols, Marta Lozano, Teresa Andrés, Vikika Costa o Daniela Rodriguez), la influencer se ha animado a hacernos partícipes de las impresiones de su entorno, que no se esperaba que después de pasar por el rosa, el platino y las californianas rescataría su tono natural.
Ari Bueno, su mejor amiga, fue la primera en animarla con un "háztelo". "Estoy yendo a Blondie, tengo ganas de ponerme color castaño. En principio me voy a hacer una hidratación", le anticipó, tal y como se puede ver en la captura de su WhatsApp. No opinaba lo mismo su amiga Mar, "que ha vivido casi todos los cambios de look conmigo de la mano", que le advirtió de que la iba "a matar" de un disgusto para cuando volviese de sus vacaciones.
Y al desconocer la opinión de su marido Risto Mejide, no muy asiduo a meterse en estos lares, podríamos decir que lo que más le ha reconfortado a Escanes ha sido el aluvión de cariño de sus seguidores. Más de mil comentarios, prácticamente todos positivos, aplaudiendo este regreso al tono oscuro, ha recibido en su último post, donde demuestra también el talento de su equipo de Blondie, el centro de belleza que abrió en Madrid hace unos meses y que compagina con sus labores en Instagram.
Después de cebarnos que un proyecto muy importante para ella estaba a punto de cuajar, fue la propia Laura la que se encargó de anunciar este salto a la estética con una especie de 'house tour' en el que nos mostró el centro casi terminado, colándonos estancia por estancia. ¡Incluso hace unas semanas, después de invitar a su pandilla de amigas influencers, fue ella misma la que se puso a lavar cabezas para echar una mano en el negocio!