La madre de la novia es una de las invitadas vip el día de la boda. Su papel, aunque relevante, no es el de la madrina, ni por supuesto tiene tanto protagonismo como su hija, pero no va a pasar desapercibida. Lo ideal es buscar un equilibrio en el que el estilo y la armonía se impongan sobre cualquier tipo de estridencias.
Aunque existen ciertas normas de protocolo, la madre de la novia debe elegir el look en función de sus gustos y de su edad, pero teniendo en cuenta que tiene un papel relevante en el que no encajan bien los escotes pronunciados, las faldas muy cortas o el exceso de brillos.
A pesar de estas restricciones, las posibilidades son muchas, desde un vestido largo a un modelo midi o un pantalón holgado, colores oscuros como el azul marino, el verde esmeralda o el color berenjena, tonos vibrantes como el rojo o el naranja o cualquier color en su tonalidad pastel, así como ciertos estampados.
Si estás buscando un look para el día de la boda de tu hija, estos ejemplos pueden ayudarte a elegir el modelo que mejor se adapta a tu estilo.
Este look sencillo y elegante es el ejemplo perfecto de cómo acertar con tu estilismo el día de la boda de tu hija. Se trata de un modelo confeccionado en crepe y gasa, que se ha combinado con zapatos-joya en el mismo color. La opción de la melena suelta, prescindiendo de recogidos y tocados, hace que el conjunto resulte mucho más fresco y natural.
Un traje de chaqueta es otra opción perfecta para el día de la boda de tu hija. Esta madre apostaba por un modelo confeccionado en tweed, en el que combinaba una falda ajustada de largo midi con chaqueta ribeteada de pedrería. El cabello recogido, un collar de perlas y un tocado a juego completaban este estilismo especialmente pensado para las más mujeres tradicionales.
Para quienes buscan un estilo menos clásico también hay opciones y el ejemplo es esta madre con un dos piezas en satén plisado verde oliva compuesto por falda recta de largo midi y blusa de cuello a la caja y manga kimono. Un tocado en contraste y una gargantilla triple de perlas completaban este look.
Si quieres lucir cuerpo, puedes optar por un modelo que se adapte como un guante a tu silueta. Esa fue la apuesta de esta madre, que elegía un sencillo vestido midi de cuello a la caja y manga larga en azul claro, que completaba con un gran tocado en idéntico color.
Para bodas de otoño/invierno, los tejidos de terciopelo son un excelente recurso para la madre de la novia. Esta elegía un modelo de tablas en un tono verde azulado con mangas de gasa, que combinó con una pamela en rafia natural.
La madre de la novia se puede permitir más licencias que la madrina y para ellas otra opción perfecta es apostar por un mono. En este caso el modelo elegido era adecuado para una ceremonia nupcial: pernera ancha, cuerpo ajustado y mangas capa muy pronunciadas. El look se completó con un cinturón ancho metalizado y una gran pamela en tonalidades coordinadas con el modelo.