Organizar la que todo un país ha acordado que será la boda del año tiene su aquel. Y si no que se lo pregunten a Tamara Falcó que, apenas un mes después de decidir retomar su proyecto de casarse con Íñigo Onieva, está inmersa en este arduo proceso del que la prensa rosa está informando minuto a minuto. Su última gran novedad al respecto fue posponerla, pasarla del 17 de junio al 8 de julio de 2023. Un cambio de planes que ha aliviado ligeramente el estado de nervios en el que se encuentra la futura novia y sobre el que se ha explayado en su última intervención en ‘El Hormiguero’.
Al ser preguntada por Pablo Motos sobre cómo lleva los preparativos, que son muchos teniendo en cuenta el calibre de este evento que tendrá lugar en el Palacio de El Rincón y que reunirá a lo mejor de la jet set, rostros muy conocidos y el clan Preysler-Iglesias-Falcó-Boyer al completo, Tamara ha asegurado estar “con un estrés tremendo”.
El dilema de tener por delante “un montón de cosas” que hacer y que “todo el mundo” de su entorno, lejos de tranquilizarla, le insista en que “no tienes tiempo” para llevarlas a cabo está generando cierto agobio a la marquesa de Griñón, que intenta consolarse a sí misma pensando que aún le quedan cinco meses para el gran día.
Según comentó en ¡Hola! este miércoles, aplazarla tres semanas había sido una decisión de fuerza mayor dado que “algunos familiares no podían venir en la primera fecha planteada”. Esto ha generado cierto debate en su programa, sobre todo por parte de Motos, que le ha pedido que no haga más modificaciones para poder organizarse la “agenda”, que la tiene “muy ocupada”.
Tamara Falcó le ha explicado que para entonces ya estará más libre de compromisos (“lo único que no te vas a poder ir de vacaciones hasta después, nada más”).
En la entrevista ya mencionada con su revista de cabecera, la hija de Isabel Preysler ya habló de este caos que es la organización de un enlace como el suyo.
“Podremos disfrutar de un poquito más de tiempo para poder organizarlo todo mejor y cuidar cada detalle, como nos gusta”, manifestó al hablar del cambio de día. Y uno de esos detalles, quizá el más importante, es el vestido de novia.
Esta misma semana se ha dado a conocer que la firma Sophie et Voilà es la escogida por Tamara para desarrollar este diseño con el que irá al altar de la mano de Manolo Falcó, su hermano y padrino de boda. Sobre por qué elegir esta marca y no otra, algo en lo que ha contado con la ayuda del diseñador Juan Avellaneda, su íntimo amigo, la hermana de Enrique Iglesias ha contado lo siguiente: “La verdad es que estoy supercontenta. Conocí la firma hace bastante y estoy supercontenta de me vayan a hacer el vestido y de que sea ‘made in Spain”.