Hay tantos tipos de bodas como parejas, y una vez que habéis decidido que vais a casaros, empieza la aventura de planificar cómo queréis que sea vuestra boda. Entre todas las opciones posibles, hay una que se ha puesto de moda en los últimos tiempos. Nos referimos a las bodas destino, que suponen toda una experiencia tanto para los novios como para los invitados. Para que no descartes ninguna posibilidad a la hora de organizar tu enlace, te contamos qué es una boda destino, cómo organizarla y por qué son tendencia.
Una destination wedding o boda destino es una celebración en la que, de alguna manera, se combina la boda con la luna de miel. Los novios eligen un lugar para casarse distinto al que viven (o al lugar de nacimiento), y puede tratarse de un destino nacional o internacional. El objetivo es celebrar la boda en ese sitio que para ellos es muy especial por algún motivo, o el que les parece más idílico para darse el “sí, quiero”. Y con junto a ellos, estarán los invitados elegidos para acompañarles en esta gran aventura de sus vidas.
Aunque había parejas que celebraban este tipo de bodas desde hace años, hay un momento clave que las pone de moda y no es otro que la pandemia que hemos vivido recientemente. Cuando por fin pudimos empezar a salir y a viajar, muchas parejas vieron en este tipo de bodas una oportunidad para convertir su boda en una experiencia única. Además, son bodas a las que suelen acudir pocos invitados, algo que también era obligado tras el confinamiento. Y ahora que ya no es necesario reducir aforo, ni guardar las distancias, las bodas destino recobran su propio encanto y se posicionan como la opción elegida por muchas parejas.
Frente a una boda convencional, una boda destino no tiene menos preparativos. De hecho, al implicar el desplazamiento de varias personas, debe estar organizada con mucha precisión y sin descuidar los detalles esenciales. Si estás pensando en apuntarte a esta boda de tendencia, toma nota de estos consejos: