Marc Piqué y María Valls ya son marido y mujer. La pareja se ha casado esta tarde en Barcelona tras varios años de discreta relación. En esa misma línea, la boda del hermano pequeño de Gerard Piqué, que se pospuso hace meses, se ha celebrado con un bajo perfil mediático, lo que no ha podido evitar la expectación. El interés principal, la presencia del futbolista junto a su actual pareja, Clara Chía, de quienes se rumoreaba que anunciarían su propio compromiso durante la velada. A ambos los ha captado la prensa durante su salida del enlace.
A tenor de las imágenes captadas por los reporteros gráficos, ambos han salido juntos, sonrientes y de la mano una vez finalizada la misa.
Para la ocasión, el defensa ha optado por traje azul marino, camisa blanca y corbata en azul claro.
Clara ha elegido un vestido sencillo, en color dorado y con estampado, cubriendo sus ojos tras unas gafas de sol.
La pareja ha intentado, a su entrada y su salida, evitar los micrófonos y las cámaras de la prensa allí congregada, que ha podido, no obstante, captar a la pareja.
La boda ha reunido, por supuesto, a la familia Piqué. A su llegada a la iglesia hemos podido ver a los progenitores del exjugador del Barça, Joan Piqué y Montserrat Bernabeu, él de chaqué azul marino, ella de vestido en verde esmeralda.
El azul marino se ha convertido en el color oficial de la familia Piqué en la boda. De este tono se han vestido los tres hombres de la familia, incluido el propio novio. La prensa ha podido captar a Marc, que trabaja en el conglomerado de empresas del deportista, en la puerta de la iglesia, charlando con su madre, madrina del enlace.
La novia, por su parte, ha abandonado los convencionalismos, apostando por un original diseño que se aleja del clásico blanco.
María Valls ha optado por un vestido en rosa empolvado y de estampado con flores, que ha complementado con una capa en el mismo tono y un enorme ramo de flores blancas.
El evento iba a celebrarse en 2022, pero las circunstancias personales del hermano de novio y su separación de Shakira provocaron que acabase posponiéndose hasta este verano. Tras la misa en la iglesia de la parroquia de Sant Vicenç de Montalt, la celebración tendrá lugar en la masía de la familia Piqué, situada en el municipio de Sant Andreu de Llavaneres, en una parcela de 4.300 metros cuadrados con piscina. Allí acudirán rostros conocidos, como el del diseñador Juan Avellaneda, autor de algunos de los elementos del look de la novia.
La boda ha sido tema de actualidad en las últimas semanas precisamente a raíz de la asistencia del hermano del novio y su pareja. Hace solo unos días, el futbolista llegaba a Estados Unidos junto a Milan y Sasha, descartando así que estos acudiesen a la boda de su tío. Sobre dicha posibilidad se ha hablado mucho últimamente, apuntando a que sería la voluntad de Shakira que sus hijos no asistiesen al evento.