Laura Escanes ha hecho una lista de peticiones "a la vida". Alcanza dos millones de seguidores en su cuenta de Instagram, ha logrado realizar los trabajos que siempre había soñado, tiene una hija de su matrimonio anterior y ha comenzado una relación con Álvaro de Luna. Sin embargo, más allá de la felicidad que le aporta todo eso, la catalana ha compartido a través de sus redes sociales los deseos que le gustaría cumplir y que ya ha pedido en una carta que ha querido hacer pública. "¿Qué le pides a la vida? Empiezo yo", lanzaba también a sus fans.
La influencer ha confesado que le encantaría que, "por una vez" los comentarios en esa última foto fuesen "todo cosas bonitas" y dejasen "la mala leche de lado". A pesar de que esa petición no se ha cumplido del todo, sí que la mayoría de sus seguidores han compartido con ella los deseos que también les gustaría cumplir en la vida.
Por su parte, Laura Escanes ha enumerado una larguísima lista de deseos que tienen como protagonista a su familia y a sus personas más cercanas: "Salud a mí y a mi gente, risas, comer rico, vinos ricos, hacer cosas nuevas por primera vez y disfrutarlas como una niña, trabajo, aprender, no conformarme y querer avanzar, viajar, mar, sol, playa, aceitunas, escuchar a mi hija reír y verla feliz, dormir con ella, despertarme con ella, que mi hija se acuerde de mis abuelos, bailar hasta que salga el sol, hacer el amor, mirar con amor, que te miren con admiración, sentirme orgullosa de la gente que quiero, que la gente se sienta orgullosa de mí".
Sin embargo, una de las cosas que ha añadido ha llamado mucho la atención. Laura Escanes desea que su abuelo la vea casarse, un sueño que ha sorprendido a sus seguidores porque la influencer pasó por el altar en mayo de 2017. "¿Verte casar? Eso es porque estás dispuesta a una segunda vez", "¿Pero no estuviste casada ya?", "Álvaro, parece que por aquí te han dejado una indirecta" o "Ya te casaste" son algunos de los mensajes que más se repiten en su post.
En el año 2017, cuando la influencer se dio el 'sí, quiero' con Risto Mejide, 'El Confidencial' publicó que la familia paterna de la catalana no acudiría a la boda y que estaban "muy dolidos" porque no había invitado a su abuelo, con el que tenía "una relación excepcional". Fue su hermano, Albert Escanes, quién ejerció de padrino. Por su parte, las únicas declaraciones que dio Laura fueron dos años después, cuando contó cuál era la relación que mantenía con su padre: "Sí me hablo con mi padre, y está muy feliz de que sea feliz con Risto y con la llegada de Roma".