Apenas ha empezado 2024, pero ya estamos asistiendo a los primeros grandes eventos que marcan la crónica social internacional. A las acostumbradas alfombras rojas y galas de premios que nos suele dejar el cine por estas fechas, en Europa hemos sumado ya una coronación, la de Federico X de Dinamarca. Mientras tanto, en Asia se celebra otro acontecimiento de altura. Se trata de la boda de Abdul Mateen, príncipe de Brunéi, y su prometida, Anisha Rosnah. El enlace de un miembro de esta familia real, desconocida en Occidente, ha adquirido una particular relevancia a nivel global debido a la destacada proyección pública del novio, y a los exagerados fastos que están teniendo lugar durante los nueve días que se prolonga.
El pequeño sultanato situado en la isla de Borneo, de apenas medio millón de habitantes, cuenta con una de las casas reales más poderosas del mundo. El actual sultán, Muda Hassanal Bolkiah, es una de las personas más ricas del mundo, con una fortuna estimada en más de 25.000 millones de euros. Es, además, el patriarca de una amplia y curiosa familia, siendo padre de doce hijos fruto de sus tres matrimonios.
Abdul Mateen es el tercero más joven, al que tuvo con su segunda esposa. Con ella tuvo también al que fuera el miembro más destacado del clan, su hermano Abdul Azim, toda una socialité internacional que trabajaba como productor en Hollywood, en cuyas fiestas se codeaba con nombres de la talla de Pamela Anderson y Mariah Carey y que falleció repentinamente a los 38 años.
Pese a no ser más que el sexto en la línea de sucesión, el príncipe desempeña un importante papel representativo y diplomático, triunfando, además, en Instagram, donde comparte buena parte de su faceta institucional y algunas instantáneas más personales y acumula dos millones y medio de seguidores. Abdul Mateen estudió Política Internacional, tiene formación militar, es jugador de polo y lleva una vida de lujos, de lo que da buena cuenta en redes sociales. Conoce a su prometida desde pequeños, ya que es amigo íntimo de su hermano.
El enlace está siendo un auténtico espectáculo. Comenzó el día 7 y se prolongará hasta el 16: entre medias, se están celebrando todo tipo de ceremonias tradicionales, ritos y festejos, que previsiblemente terminarán con un gran banquete de gala en la noche del 15 de enero, al que se espera que acudan representantes de las principales casas reales de todo el planeta.
Entre las imágenes que ya hemos podido ver en estos días de boda, la máxima es la opulencia. Inmensos palacios abarrotados, decoraciones en oro y estampados orientales, vestuarios exuberantes que combinan la alta costura con la tradición del país, oraciones, rituales y conciertos están llenando la agenda del sultanato bruneano.
En estas imágenes previas hemos podido ver, también, los esperados vestidos de la novia, nieta del consejero especial del sultán y educada en Reino Unido. De momento han sido tres las piezas que se han podido ver: todos ellos son de corte tradicional y monocromáticos, con encajes, hilos de oro, piedras preciosas y la cabeza siempre cubierta.