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La figura de la madrina de boda es una de las más relevantes del día D, por supuesto, siempre por detrás de los novios y en paralelo a la del padrino. Es habitual que este papel lo asuma, hablando de manera generalizada, la madre del novio y lo ideal es que elija un look algo más especial que el del resto de invitadas sin robar el protagonismo a los contrayentes, pero tampoco debe optar por un modelo con el que pueda pasar desapercibida.
El estilo, la edad y el tipo de boda que se vaya a celebrar, son determinantes a la hora de elegir el vestido de madrina, sin olvidar que existe un protocolo no escrito que hay que cumplir y salvo que se trate de una boda especial en la que no hay normas, es deseable evitar los escotes excesivos, las transparencias evidentes o los vestidos demasiado cortos.
Existen muchas opciones que pueden provocar dudas, especialmente cuando se trata de mujeres de mediana edad que han cumplido los 60 año y a las que generalmente el cuerpo les ha cambiado, entre las que son habituales si es mejor optar por un vestido largo o a media pierna, estampado o liso, clásico o moderno…
Saber lo que le favorece a su figura y elegir un modelo con el que se sienta cómoda son dos reglas básicas para acertar con el vestido de madrina y estas propuestas que favorecen a todas las siluetas, pueden ser una opción con la que acertaría cualquier madrina.
Si la boda se celebra en invierno, una propuesta perfecta para una madrina es este conjunto de Victoria Colección (995 euros) que combina un vestido de manga larga que lleva una pequeña cola en el bajo, con una capa corta en idéntico tono. Cuenta con un detalle de plumas en cuello que lo convierte en una apuesta sencilla con un discreto toque de sofisticación.
Esta otra propuesta viene de la mano de la firma Boüret (490 euros), un vestido de crepe con manga tres cuartos, ajustado en la parte de los hombros y que se abre en capa para evitar marcar la silueta. Cuenta con un detalle de volantes de tafetán en el cuello que le aportan el toque festivo justo que necesita una madrina.
Este modelo de Adolfo Domínguez (329 euros) es un vestido túnica de acabado satinado en amarillo cúrcuma. Se trata de un modelo de cuerpo rectangular que se ajusta a la cintura solo en el delantero, un detalle que lo convierte en la pieza perfecta para estilizar la silueta.
Este vestido de Cortana (1400 euros) es perfecto para una madrina que quiera salir de los tonos clásicos. Se trata de un modelo confeccionado en seda de color oro con acabado metalizado que se envuelve en la silueta y se ajusta a la cintura, con manga capa, cortado al bies y escote en V, que estiliza el busto y alarga el cuello.
Un estampado discreto es otra buena apuesta para madrinas que quieran salirse de las convenciones. Este vestido de Roberto Diz x IQ Collection (380 euros) es una opción perfecta para una boda de día, un modelo azul con lunares de terciopelo negros, con detalle frontal plisado y abertura en la espalda al que, además, se puede sacar mucho provecho después de la boda.
También de acabado metalizado es este vestido de The 2nd Skin Co. (1350 euros) confeccionado en mikado, un modelo de corte arquitectónico para las madrinas más atrevidas, que pone toda la atención en el cuello y el escote en V, con hombros ligeramente elevados y estructurados. El corte recto permite llevarlo suelto o ajustarlo a la silueta mediante un cinturón.