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A las 12.20 del mediodía, Paloma Lago llegaba del brazo de su hijo a la iglesia de San Fermín de los Navarros, en el barrio de Chamberí donde hoy se celebra el enlace de Javier García Obregón con Eugenia Gil, su novia desde hace siete años. La exmodelo, que ha ejercido de madrina en el enlace, ha compartido protagonismo con los contrayentes y con la madre de la novia, con la que Eugenia mantiene un vínculo muy especial y saltándose todas las tradiciones también será madrina de su hija.
En las inmediaciones del templo, donde hemos podido ver los distintos looks de los asistentes, Paloma ha elegido para la ocasión un modelo de la firma nupcial Anmargo, el taller que lidera Anna Anmargo y que ha vestido, entre otras muchas celebridades, a Ruth Lorenzo en Eurovisión, Paula Vázquez y, por supuesto, a Paloma Lago que, además de desfilar para ella, ejerce el papel de embajadora de la marca.
El modelo elegido por Paloma Lago es un vestido largo de color verde menta muy suave, un tono muy similar al modelo de tweed de Ana Obregón. Se trata de un modelo de escote asimétrico con pliegues en el hombro, silueta ajustada y ceñido a la cintura con un cinturón. Ha completado su look con una vaporosa capa superpuesta que lleva sujeta al cuello y que cae hasta el suelo con una ligera cola.
En cuanto a los accesorios, la exmodelo ha optado por un broche de plata y brillantes que combina a la perfección con los pendientes y el anillo de tres vueltas y que lleva prendido al hombro. Además ha optado por llevar en la mano un clutch en piel de serpiente rodeado de brillantitos y unas sandalias tipo cangrejera en tonos metalizados y de tacón altísimo que apenas se veían bajo el vestido.
A pesar de su papel de madrina, Paloma ha evitado los excesos propios de una boda de día, es decir, nada de tocados, pamelas o mantilla y ha preferido un peinado sencillo dejando su media melena suelta con la raya a un lado y un sencillo semirrecogido.
Para el look de belleza, la madre del novio ha optado por destacar los ojos con un potente ahumado y varias capas de máscara de pestañas. El resto del maquillaje, más adecuado para una boda de día, destaca por una piel muy trabajada con un ligero rubor en las mejillas y labios de color coral.