Tanto si es la primera boda a la que asistes, como si ya llevas unas cuantas a las espaldas, cuando confirmas asistencia se abren ante ti unas cuantas cuestiones. Y es que en este caso la experiencia puede no ser un grado, porque las bodas de ahora no tienen que ver nada con las que se celebraban hace diez años y por tanto, la forma de comportase de los invitados, también ha cambiado. De hecho existe una profesión que consiste exclusivamente en organizar eventos nupciales. María José Gómez Verdú es Manager Director de Protocolo y Etiqueta y Lara, es parte de Petite Mafalda se dedican al negocio de las bodas y detallan todo lo anterior en en la radiografía actual de las bodas en España. Nadie mejor que ellas para resolvernos todas las dudas respecto a cómo debemos comportarnos en una boda para quedar bien.
Y es que más allá de la etiqueta que tenemos que seguir a la hora de vestir, o la cuantía de dinero a entregar a los novios, hay muchos otros detalles que podemos pasar por alto y pueden ser pistas de que nos manejamos con soltura en este tipo de eventos. Las dos expertas nos ayudan a identificar esas pequeñas cosas que no se escapan a su visión.
Antes de la boda, algo que te agradecerán muchísimo los novios y con lo que ya ganarás un punto con ellos es la confirmación temprana. Una de las partes más tediosas de la organización es la distribución de los invitados en las meses para la comida. Es una tarea que los novios no pueden delegar en las 'wedding planners' -o al menos no por completo-, por tanto, cuanto antes tengan el número definitivo de invitados antes podrán cerrar el 'sitting' sin volverse locos. Por otro lado, en esta confirmación también debes responder a las cuestiones que te consultan los contrayentes -posibles intolerancias y si vas a usar el servicio de autobús...- intentando ser lo más realista posible, puesto que estos son gastos extras que deberán asumir los novios. No deberías comunicarlo más tarde de una semana después de recibir la invitación de los novios, ya sea aceptando o rechazando la invitación.
Otra señal indiscutible de que los novios y este día tan importante para ellos te importan es la puntualidad en la ceremonia, ya sea civil o religiosa, es una cuestión de respeto y educación. Los protagonistas son los novios, no los invitados que llegan con retraso. Por eso, debes calcular muy bien los tiempos en el caso de que vayas a acudir a la peluquería o a tu centro de maquillaje, estipula algunos minutos de más, por si ocurre cualquier imprevisto.
Las organizadoras de boda subrayan la importancia de mantener el respeto durante la ceremonia, evitando hablar o usar el teléfono móvil -mejor en modo avión para no tener sorpresas-. También en la recepción, donde conviene no beber en exceso, ni comportarse de manera inapropiada. Si tienes hijos, hay que estar siempre atentos al comportamiento de los más pequeños también.
Este punto del respeto, en el que las expertas destacan que los novios son protagonistas, es muy importante y es el lema que debe regir el comportamiento de los invitados. En este sentido, otro detalle en el que coinciden las expertas es evitar el uso de un complemento: "No te pongas gafas de sol. Aunque haga un sol radiante", y es que se trata de un accesorio muy llamativo que no es protocolario en las bodas. De la misma forma, debes actuar con discreción a la hora de entregar tu regalo. Piensa una forma para que sean únicamente los novios los que se enteren qué les has regalo.
Finalmente, marcarás la diferencia si muestras tu agradecimiento. Sería muy recomendable, explican las profesionales, agradecer a los novios y a sus familias por la invitación. Mandar un mensaje de agradecimiento después de la boda es una muestra de cortesía y, también, de cariño y es un detalle que hará que todos ellos te tengan presente.