La boda de Carmen Sevilla y Augusto Algueró fue casi una cuestión de estado. Se celebró en Zaragoza, el 23 de febrero de 1961, y la celebración fue grabada por Televisión Española para retransmitirse en el NODO. El mismísimo papa Juan XXIII envió un telegrama para felicitar a la pareja y darle sus bendiciones. Y por si eso fuera poco, todas las tiendas de la capital aragonesa cerraron antes del mediodía para no perderse nada de aquella boda. Se casaba Carmen Sevilla, la novia de España, y eso eran palabras mayores.
Carmen Sevilla defendía públicamente su status de mujer virginal que iba a esperar al hombre adecuado para contraer matrimonio. Muchos lo intentaros, incluyendo al famoso Mario Moreno “Cantinflas”, pero fue el compositor Augusto Algueró el que conquistó el corazón de la actriz. Aunque se conocían desde hacía tiempo, su noviazgo apenas duró tres meses y fue llevado casi en secreto. Así que fue una gran sorpresa para todos el anuncio de su boda.
La pareja debía decidir dónde casarse y, aunque el carácter tradicional de la novia parecía empujar a una boda en Sevilla, lugar donde nació, ambos tomaron otra decisión. El novio era de Barcelona, así que acordaron casarse en un lugar intermedio, Zaragoza. Carmen Sevilla se mostraba encantada con la idea, puesto que se confesaba una verdadera devota de la Virgen del Pilar, y siempre que pasaba por la ciudad se acercaba a visitarla.
La actriz, cantante y presentadora hizo su aparición en un Cadillac y, de camino al altar, se pudo descubrir al completo el vestido de novia diseñado por Pertegaz de corte clásico, sencillo y atemporal. Con escote barco y manga francesa, se realizó en raso de seda y estaba compuesto por infinitas capas de tul.
Aunque el vestido era sencillo (y precioso), Carmen supo elevar el look con unos complementos espectaculares, como el velo de tul de siete metros de largo, una diadema de brillantes y zafiros, y unos guantes satinados.
Se calcula que unas 30.000 personas se acercaron hasta la catedral de Zaragoza para vitorear a los novios, pero los invitados oficiales al enlace fueron unos 300, entre los que se encontraban Nati Mistral y Estrellita Castro. La celebración con ellos tuvo lugar en el Hostal del Ciervo de los Monegros, donde disfrutaron de un menú en el que destacaban los productos locales, como el pescado del río Ara bella marinera y ternasco de Bujaraloz.