Las fotos de una boda ya no son lo que eran. Si antes los álbumes de fotos nupciales se llenaban de fotos extra retocadas y con instantáneas muy posadas de los invitados, que después se completaban, muchas páginas después, con retratos de los invitados en las mesas y posando junto a los novios de pie en medio del salón de bodas, ahora la cosa es totalmente diferente. Y es que desde hace un tiempo la entrada a la celebración de una boda se ha convertido en una especie de alfombra roja, porque se han puesto de moda los photocall para boda.
Y no nos extraña nada, porque tener un photocall en tu boda supone una diversión más para los invitados, que, a medida que se vayan animando darán momentos geniales delante de él y que quedarán para el recuerdo, regalándote un álbum de boda de lo más original y sobre todo único, gracioso y muy especial, que te hará revivir las anécdotas de la velada una y otra vez. Además, puede ser una opción perfecta para abaratar costes, ya que, aunque puedes tener un fotógrafo para los momentos de la boda, también pueden ser los propios invitados los que hagan las fotos.
Aún así, lo mejor es que no solo hay un tipo de photocall para poner en tu boda. Y no, no pienses que con photocall nos referimos solo a esa gran lona con la temática del evento delante de la que se posa, que también. Los hay de muchos tipos, tamaños y maneras de hacerlos y hacerlos parte de la fiesta de tu boda. Así que, sigue leyendo y te contamos cómo hacer un photocall personalizado, tú solo tienes que elegir el que mejor va contigo y con tu boda. Y es que puedes hacerlo como un marco de Instagram, con cartelitos tipo sticker, con luces, flores, etc. He aquí las ideas que necesitas para hacer un photocall casero.
El photocall de Instagram se ha convertido en una de las opciones más recurrentes en todo tipo de fiestas, especialmente en las de cumpleaños. Y de ahí, se están haciendo realmente comunes en las bodas, y es que no puede haber un fondo más de actualidad. Se trata, en definitiva, del marco típico en el que se encuadran las fotografías y vídeos que subimos a Instagram, con su opción de dar like, comentar o enviar a alguien por mensaje directo.
Este es el photocall personalizado más fácil de hacer, ya que solo hay que hacer un marco photocall con cartón. Para personalizarlo, lo único que necesitáis es pintura e imitar la plantilla de Instagram, añadiendo el nombre de los novios en la parte superior del marco.
Esta es otra de las opciones que más se están viendo en las bodas actuales, especialmente en las que se celebran al aire libre. Y es que no hay nada que quede mejor con la naturaleza y lo frondoso de una buena planta que las luces de neón. Puedes ponerlas en forma de cascada, como una lluvia de pequeñas bombillas o como una cortina de luces o como hicieron Laura Escanes y Risto Mejide, que pusieron su #toelrrato en neones sobre unas enredaderas y sobre un Chester para dar más juego al photocall. Y es que no está de más que, además de la parte frente a al que se pose haya atrevo y decoración para que los invitados puedan interactuar y que así no sean todas las fotos iguales.
Similar a esta opción es la de hacer un photocall con flores o con globos. Esta quizás es la opción más simple y estática, ya que será más estrictamente lo que se entiende por un photocall, ya que es en forma rectangular como un fondo. Eso sí, también es el más fácil de montar, especialmente el de globos, ya que solo hay que colocarlos en forma de marco. Para hacerlo algo más personal, podéis poner una frase que os represente o vuestros nombres y, por supuesto, elegir los colores que más vayan con vosotros y con la estética de la boda.
En este caso no necesitarás un photocall de boda en sí o puedes completar tu photocall con ello. No tendrás que romperte demasiado la cabeza, ya que la atención recaerá sobre estos carteles, bocadillos, gorros de fiesta, pancartas, boas y demás dibujos a modo de sticker con los que vuestros invitados completarán sus looks ante la cámara. De hecho, lo mejor será que el photocall, en esta ocasión, sea algo más discreto o llano.
Pero si piensas que lo vuestro no es un photocall pero no quieres renunciar a esa parte divertidísima en la que todo depende de los invitados y las fotos son una anécdota en sí mismas, puedes poner un fotomatón. Los invitados no dejarán de entrar toda la noche y regalar momentos únicos. Aunque se lleven alguna de las fotos, pon un álbum al lado para que, cuando terminen de hacerse las fotos, lo vayan completando. Construirán un auténtico regalo para vosotros. Complétalo también con los bocadillos y stickers, boas de plumas y demás atrezzo y vestuario para sumar un grado más de diversión.