Encontrar las palabras perfectas para un momento especial es complicado. Y este el caso de las felicitaciones y las dedicatorias a los recién casados. Por regla general suele ser difícil encontrar las frases exactas para un amigo cercano o un familiar y más en esos momentos, cuando nos inundan los nervios. Nuestro mayor temor será quedarnos en blanco, tartamudear o no saber cómo expresarnos. Por eso, si alguno de los novios ya te ha pedido que leas algo en su boda, no habrá nada mejor que prepararse. Sí que es cierto que lo más ideal será que no leas el discurso, sino que lo lleves aprendido desde casa. Aún así, si no confiamos demasiado en nuestras capacidades, siempre podrás echar un ojo al papel.
En esas frases para los recién casados tendrás que resumir un poco cómo ha sido vuestra relación, que es lo que más destacarías de ellos como pareja y cómo crees que se va a desarrollar el futuro. Esas palabras podrán ser tomadas de algún libro, hacer referencia a algún poema que crees que represente a la pareja o de tu propia imaginación. En este último caso, lo mejor será que dejes volar tu imaginación. Aunque eso sí, si intuyes que no vas a encontrar las palabras adecuadas o no se te da muy bien escribir, siempre podrás recurrir a la literatura. Y no será nada malo.
Eso sí, escribir el discurso de boda perfecto no será nada fácil. Lo primero que debes saber es que tendrá que ser un reflejo de todo lo que sientes, sin dejarte un ápice. Piensa bien el mensaje que quieres transmitir, lo que quieres decir, lo que sientes y cómo quieres trasmitirlo. Seguidamente, hazte un borrador de todas las ideas que se te han pasado por la cabeza, como un ‘brain storming’. Empieza contextualizando el momento y echando la vista atrás para que los invitados entiendan tu relación con la pareja. Finaliza con una buena reflexión sobre todo lo que supone para ti que los novios pasen por el altar y lo que les queda por construir. Luego, piensa el tono con el que quieres hacer el discurso.
Una vez que tengas todo claro, lo mejor será que te pongas manos a la obra. Para ello, coge boli y papel o el ordenador y escribe todo el discurso. En ese momento, la información tendrá que fluir, ya que ya te hiciste un borrador y has tenido claro todas las partes del discurso. Será muy importante que en tus palabras haya un equilibrio entre la emoción y el humor, ya que un discurso muy emotivo podrá ser un poco aburrido y un discurso demasiado gracioso, podrá no gustar a todo el mundo. Por eso, en este caso, la virtud está en el punto medio. Si comienzas con algo de humor, este ayudará un poco a romper el hielo, a calmar los nervios y a poner las bases del discurso. Eso sí, intenta no recurrir a los chistes fáciles y respeta ante todo a los invitados, ya que habrá ciertas bromas que puedan molestar.
También será muy importante que no te olvides de los demás. Por tanto, piensa siempre en los invitados y hazles parte del discurso siempre que puedas. Contar con su colaboración te ayudará a relajarte y el peso no estará tan encima de ti. Además, incluir anécdotas familiares y de amigos también te ayudará a lanzarte más en tu discurso. En el caso de que quieras mencionar a las personas que ya no están, tampoco te excedas demasiado con los dramas. Será muy bonito y emotivo nombrar a aquellos que siguen vivos en nuestros recuerdos, pero tampoco queremos que se convierta en un momento de tristeza absoluta. Lo mejor será que utilices un lenguaje llano, natural y a la altura de todos los presentes. Para ello, escribe con el corazón, que es de donde saldrán las palabras más sinceras. Y controla la extensión del texto.
Para ayudarte en su realización, lo mejor será que utilices una serie de frases que te ayudarán como guía en tu discurso:
"Que la alegría que os inunda ahora siga siempre en vuestra alma y en vuestros corazones. Estoy segura de que seréis muy felices, enhorabuena por este día".
"Que esta nueva vida que iniciáis juntos, se mantenga llena de amor, felicidad y comprensión. Que los sueños de ambos sean una realidad cada día. ¡Enhorabuena!"
"Hoy es el principio de una nueva aventura, de un camino que vais a recorrer juntos. Que la felicidad de esta maravillosa boda sea vuestra guía".
"Una relación se forja y enriquece con amor, respeto y sinceridad, y estamos seguros que son las velas con las que navega el barco de vuestro amor".
"Que el amor que los une se fortalezca con cada día que paséis juntos. Que cada problema o desafío que la vida os ponga delante sea para uniros más, para aprender de cada uno y para quererse mucho más aún".
"Como pareja nos hacéis creer en el amor y en la felicidad".
"No existirá problema o dificultad que no podáis superar con paciencia, respeto y mucho amor. Espero que siempre mantengáis ese positivismo y alegría que os caracteriza porque así la vida será mejor".