Ahora mismo, la relación entre Dulceida y Alba Paúl no está pasando por su mejor momento. La pareja de influencers contrajo matrimonio en septiembre de 2016, aunque nunca llegaron a formalizar los papeles. A pesar de eso, el enlace estuvo cuidado al mínimo detalle y se convirtió en una de las bodas del año. Casi como la pedida de mano, que se produjo el 4 de julio de ese mismo año delante de todos sus seguidores durante su festival, el Dulce Weekend, que celebraba en Barcelona.
La esperadísima boda tuvo lugar el 10 de septiembre de 2016. Hasta el último día, las novias mantuvieron la fecha del enlace en secreto. De esta manera, pudieron llevar a cabo todos los preparativos del gran día con toda tranquilidad y en familia. El lugar escogido fue Cala Morisca, una pequeña playa de Sitges, donde realizaron una preciosa e íntima ceremonia con sus familiares y sus amigos más cercanos.
Para ese momento tan especial, Alba se decantó por un elegante traje blanco con un impresionante escote en V, la melena suelta y unas delicadas joyas firmadas por Tous. Por su parte, Dulceida lució un look muy diferente. La estrella del outfit fue su vestido, diseñado por el catalán José María García, director artístico de ZeGarcía, uno de sus diseñadores estrella.
El vestido destacaba por su toque romántico, con la espalda al descubierto y con encaje. Además, tenía un cancán y una estructura de unos 35 metros de tul. El beauty look estuvo marcado por un recogido sencillo y una bonita tiara en dorado que completaron el outfit de la influencer.
Eso sí, la catalana se cambió de vestido una vez que empezó la celebración del amor. Así, se decantó por un diseño aún más romántico, lleno de transparencias, con un interesante escote en la espalda y rematado con un volante. Además, el vestido seguía la tendencia cold shoulders, es decir, dejaba los hombros al descubierto, con unos tirantes finos y mangas de encaje, al igual que el cuerpo del vestido. Como el primero que lució, este también estaba firmado también por Ze García.